CASTELLÓ. El informe sobre gestión de residuos y limpieza viaria del Ayuntamiento de Castelló muestra una caída del 28,39% en las fracciones vinculadas a la construcción, una reducción que está directamente vinculada a la parada de la actividad durante el estado de alarma y a la reducción de las obras durante los meses posteriores. Así, el ecoparque ha recibido hasta 155 toneladas menos de voluminosos y otros 265 de madera, mientras que los escombros se han reducido en más de medio millar de toneladas durante el primer semestre del año.
Por el contrario, han subido significativamente los residuos electrónicos, de los cuales han llegado 140 toneladas. Esto supone un 43% más que en el mismo periodo de 2019. En cuanto a los restos de poda, el ecoparque de Castelló ha recibido un 10% más que el año anterior y ha superado las 93 toneladas de este residuo.
"La situación excepcional que hemos vivido nos ha llevado a una alteración en los patrones de generación de residuos y podemos decir que, en este caso, se hace patente en la reducción de los restos que han llegado al ecoparque", explica el concejal de Reciclaje y Gestión de Residuos, Ignasi Garcia. El edil también señala que "este cambio tiene una vertiente positiva y es el incremento del reciclaje en fracciones como el vidrio, el cartón o los envases, que han experimentado incrementos de entre el 5 y el 25%" y añade que "esperamos que los nuevos hábitos hayan venido para quedarse".
En este sentido, cabe señalar que el ecoparque de la ronda Oeste ha funcionado con los horarios habituales desde la declaración del estado de alarma. El ecoparque móvil volvió a funcionar al 100% de su capacidad durante el mes de mayo.
El informe elaborado por la UTE FCC-Fobesa, concesionaria de los servicio de limpieza y gestión de residuos en la ciudad, recoge el incremento de los servicios de limpieza viaria con agua y la incorporación de sustancias como el hipoclorito a estos trabajos. Además del baldeo de calles, las soluciones desinfectantes se han aplicado también a los elementos del mobiliario urbano, como las papeleras o las paradas de autobús. Para completar la programación de limpieza viaria, el servicio cuenta con un sistema de nebulización que hace más efectiva la desinfección de pavimentos y contenedores y que se podría utilizarse en otros espacios abiertos y de grandes dimensiones si fuera necesario.