Isidre FainéVALÈNCIA. "Nos vemos en la necesidad de ponernos en contacto con usted para pedirle ayuda y darle nuestra visión y opinión del momento actual en el que nos encontramos, ya que usted es persona indispensable en CaixaBank (CABK). Usted puede ser pieza clave de la solución, como ha demostrado en tantas ocasiones. Le rogamos tenga en consideración nuestra petición y ponga cordura a esta situación crucial para la supervivencia de nuestra empresa y, por tanto, de la Obra Social de la que nos sentimos tan orgullosos". Así rezaba parte de la carta que los sindicatos del banco enviaban el pasado miércoles a Isidre Fainé, actual presidente de la Fundación 'La Caixa', Isidre Fainé. Lo hacían para que "ponga cordura" en la negociación del Expediente de Regulación de Empleo (ERE), cuya prórroga expira este martes 29 de junio y que se anticipa 'movido' porque ayer CABK y la mesa sindical no llegaron a acuerdo alguno en una maratoniana jornada -mañana y tarde-.
El banco dirigido por Gonzalo Gortázar y los sindicatos deben cerrar un acuerdo sobre el despido colectivo este martes, último día de la negociación. De no ser así, la entidad podría aplicar unilateralmente las medidas que estimase, que no necesariamente deben coincidir con las presentadas en la propuesta de ayer lunes. Para los sindicatos, que se garantice el 100% de salidas voluntarias continúa siendo una línea roja para llegar a un acuerdo. De ahí que mantuvieran la huelga de dos horas programada para hoy, entre las 10 y las 12 del mediodía.
"La dirección empezó esta negociación con un 'lo queremos todo' (máximos despidos, máximos recortes laborales, expectativas, etc.). Lo querían, o lo pedían todo… 'más vale que sobre a que falte' es su tónica en toda esta negociación. A estas alturas –y a un día de finalizar el proceso- la Dirección realiza tan solo leves movimientos. Lo llaman renunciar a 'sus pretensiones negociales' pero cuando se quiere todo, absolutamente todo, es fácil ir centrando a lo que realmente se presupone que quieren: despidos forzosos", así empieza el comunicado conjunto de los sindicatos de CABK que sacaron tras finalizar la reunión de ayer lunes.
"A pesar de que la dirección presenta una reducción en las extinciones situándolas en 6.950 personas -sigue el comunicado-, desequilibra los cupos provinciales llevándonos a despidos forzosos porque los excedentes no se podrán cubrir con colectivos A y/o B, además mantiene recortes económicos a la plantilla cuando plantea un ERE por causas organizativas, sin atender medidas para paliar el impacto en la promoción. Todos los sindicatos hemos dicho de manera clara que no aceptamos despidos forzosos, y no los aceptamos porque no son necesarios, ya que es posible implementar otras medidas no traumáticas. Señores de la dirección, los sindicatos no vamos de farol. El 90% de la plantilla nos respalda, mientras que a ustedes la plantilla, los clientes y nosotros les hemos retirado nuestra confianza. Si no saben capitanear hagan el favor de remar, al menos a favor. La dirección no nos deja otra que volver a la huelga".
Tal y como informó ayer Valencia Plaza, los trabajadores de la red afectados por el ERE de CaixaBank alcanzan los 860 en la Comunitat Valenciana. Se trata del 14,4% del total nacional de de la red, servicios centrales, dirección territorial y excedencia. Madrid concentra la mayor parte del excedente con 1.297, duplicando a Barcelona que con 616 es la segunda, Valencia la tercera con 563, Baleares (344) la cuarta y Sevilla (310) la quinta. Todo lo contrario que Zamora, que es la única provincia española que se ha librado; mientras que las menos afectadas son Teruel (1), Soria (3), Melilla (3) y Huesca (5). Una cifra que podría variar a la baja este martes, siempre y cuando se llegue a algún tipo de acuerdo.
CABK presentó ayer una propuesta que simplifica la definición de colectivos por edades y unifica las condiciones para todos los mayores de 54 años. En cuanto a los criterios de adscripción, dado el establecimiento de cupos en algunas franjas de edad, la dirección de la entidad ha retirado el límite del 60% de adscripción voluntaria al plan por parte del colectivo de mayores de 50 años. Asimismo, rebaja a seis años la antigüedad requerida a empleados a partir de 52 años para acceder a la indemnización planteada para su franja de edad.
Por otro lado, en la negociación de la propuesta de modificación de condiciones laborales, la dirección de la entidad los aspectos organizativos ligados el desarrollo de los modelos de oficinas Store, atención remota inTouch y oficinas rurales, así como la propuesta de reforma del plan de previsión social de los empleados. Todo ello recortando el número de salidas hasta las 6.750 desde las 6.950 anteriores.
En este aspecto, la dirección de CaixaBank ha propuesto modificar las coberturas de riesgo del plan de pensiones de los empleados de la entidad pasando de una fórmula de rentas a una de capitales, la más habitual en los planes de pensiones de las empresas del Ibex 35, e incrementar un 1% las aportaciones de jubilación de la entidad al plan de pensiones, tanto para los empleados provenientes de CaixaBank como para el colectivo procedente de Bankia cuando se reduzcan sus capitales de cobertura de riesgos.
