Mira: "La estructura de Feria Valencia se tiene que ajustar a sus necesidades reales"

VALÈNCIA. El rescate de Feria Valencia por parte de la Generalitat irá acompañado de una reducción de su estructuración para adaptarse a la nueva situación, marcada por la ausencia de actividad, el desplome de los ingresos y una deuda con proveedores por la falta de liquidez que ya supera los 3 millones de euros.

Así lo reveló este jueves la secretaria autonómica de Modelo Económico y Financiación, María José Mira, preguntada sobre la delicada situación que atraviesa el recinto ferial en una entrevista con Plaza Radio. Según explicó Mira, la situación actual y la urgencia por resolver el desequilibrio patrimonial de Feria Valencia antes del 31 de marzo obligan a replantearse su estructura.

"Hay que replantearse feria y reestructurarla en su forma jurídica y en su estructura, optimizar los activos tanto personales como los edificios", opinó Mira, quien consideró que mientras tanto la administración puede utilizar sus instalaciones como almacén, tal y como ya está haciendo con los monumentos falleros, el material sanitario o los residuos de la covid.

Tal y como publicó Plaza, el Consell explora la vía para resolver la crisis de liquidez del recinto, cuya caja está más que agotada tras un año sin apenas ingresos por la falta de actividad y sin la perspectiva próxima de volver a albergar certámenes.

La reciente modificación del Marco Temporal de ayudas de Estado de la UE permite a la Generalitat ampliar hasta 1,8 millones de euros la ayuda de 800.000 euros que ya le concedió para cubrir sus costes de funcionamiento, incluidos los costes de personal y los de estructura.

Sin embargo, las necesidades de Feria Valencia se elevan al menos a 6 millones de euros y en el peor de los casos, si se retrasa la vuelta a la actividad, pueden llegar a 11 millones según las estimaciones de su director general, Enrique Soto. Esta entrada de liquidez es urgente para evitar la declaración de concurso y pagar las deudas a proveedores, nóminas, Seguridad Social y tributos, entre otros.

No obstante, según manifestó Mira en la entrevista, la solución al problema de tesorería de Feria Valencia no puede desligarse de su plan de reestructuración y de la operación por la que la Generalitat Valenciana se subrogará la deuda del recinto ferial.

Ello depende de que el Ayuntamiento de Valencia y la Generalitat concreten la fórmula mediante la que la Generalitat será compensada por esa asunción de deuda y el recinto ferial verá resuelto su desequilibrio patrimonial.

Al fracasar la vía de la permuta de activos entre el Ayuntamiento y la Generalitat por la negativa del Consistorio a aceptar como intercambio parte de los inmuebles del propio recinto ferial, ambas instituciones parecen haber encarrilado un pacto para la cesión a la administración autonómica de los terrenos y los edificios mediante la fórmula de la mutación demanial externa.

Con ello, la Generalitat pasaría a ser titular de los terrenos y de la concesión municipal a favor de Feria Valencia hasta 2051, al estar el suelo afecto al servicio público que va a prestar directamente la administración valenciana.