CASTELLÓ. En el marco de la reunión comarcal de alcaldes que se celebró este lunes en Betxí, la alcaldesa de Onda, Carmina Ballester, solicitó al presidente de la Diputación, José Martí, la colaboración del gobierno provincial para la puesta en marcha del servicio de mamógrafo y la construcción de la segunda residencia de mayores en la ciudad. Se trata de dos proyectos "muy necesarios y demandados por los ondenses que el equipo de gobierno se comprometió a sacar adelante", tal y como ha informado el propio consistorio de la localidad a través de un comunicado.
No obstante, según el Ayuntamiento de Onda, la respuesta de la Generalitat Valenciana, entidad competente en Sanidad, ha sido negativa para habilitar el servicio de mamografía aludiendo que no cumple con los criterios de población. Ballester argumentó la medida al considerar que además de beneficiar a más de 4.000 mujeres de Onda, el servicio pretendía cubrir población de la comarca, por lo que esta sería mucho mayor, además de aportar posibles alternativas como un servicio móvil que llevara a cabo las revisiones durante determinados días.
"En el primer centro de salud de Onda tenemos una habitación perfectamente emplomada con un servicio de radiología que sería apto para recoger este servicio desde el punto de vista asistencial", explica la primera edil.
En cuanto a la segunda residencia de mayores, "tan necesaria para ampliar las 66 plazas existentes a día de hoy para más de 4.000 mayores que viven en Onda", la Generalitat supeditó la construcción a la colaboración económica de la Diputación de Castellón. Al respecto, un informe municipal expone la preocupante situación actual debido al envejecimiento de la población y al grave déficit actual de plazas, con una tasa de cobertura del 1,5% (hay 1,5 plazas por cada 100 personas mayores), muy inferior al del resto de ciudades tal y como apunta el consistorio ondense.
