'Terreta' Mítica
Ha pasado el 9 d'Octubre, otra fecha más en la que la distancia entre alicantinos, castellonenses y valencianos se agranda
VALÈNCIA.- Se lo dije: «Yo es que soy incapaz de percibir en algunos caldos esos matices de barrica de fenogreco con aroma cálido, afrutados y sulfitos volcánicos».
— Lo que eres es un necio que no sabe lo que se pierde.
—Vale, tienes razón. Pero es que llevo tantos años bebiendo edulcorados que tengo el sentido del gusto deformado. Lo mismo pasa con las mujeres, que tanta publicidad me ha alterado el sentido del buen gusto.
A pesar de mi tramposa juventud ya le huelo el culo a los sesenta, así que desde hace tiempo ando reciclando mi vida. En ningún lugar estoy mejor que en casa, donde tengo tanto acumulado por hacer que no he hecho y tanto por leer que no he leído, que según mis cálculos y siendo generoso y optimista, no me queda vida suficiente para poner la balanza al cero. Pero oooh... ¡¡¡Llega un regalo en formato pandémico!!! Todos en casa y recomendación de no salir. Habiendo redes sociales, para qué quiero profesionales, ¡¡serán zoquetes!! Alarma, miedo, confusión, inseguridad, dudas y mal genio. Para los de arriba tranquilidad absoluta, todo está perfecto. En mi caso, ninguna novedad, todo rutina.
Vivo en modo confianza. A los que mandan los imagino en sus despachos, rodeados de asesores, amigachos y videntes, disfrutando de canapés de anchoa del Cantábrico y discutiendo de si ese regustillo es de frenogredo o de baya tibetana.
— Yo, yo, yo es que lo prefiero un poco más fresquito.
Sí, así es como los veo en sus neodiscursos.
— Oye, fulano, ¿ves como hemos salido palante precarizando la sanidad y los servicios públicos a costa de rescatar entidades privadas?, que tampoco era tan complicado. Y por cierto mengano, no ha pasado nada por malvender instituciones y despilfarrar funciones públicas a empresas, a las que insisto, diles que se tranquilicen, que si les va mal, estamos aquí para protegerlos.
¿quién comentó lo de la conciliación familiar de abuelos cuidando hasta de los nietos? Pues ese tipo es un genio, sí señor
— Gracias perengano, que sepas que tus medidas a favor de la desruralización han ayudado a hacinar gente en las grandes ciudades y eso supone ingresos urbanísticos. Los de los consistorios están encantados. Y tú zutano, aquello de reducir salarios y abaratar despidos está acabando con la estabilidad económica y fíjate qué bueno, se refleja incluso en los nacimientos. ¡¡Qué gran idea tuviste!! Afecta al envejeci-miento de la población y eso implica hasta una reducción del censo activo. Eso está muy bien porque así congelamos las pensiones y ahorrar nos viene que ni pintao.
–Por cierto, ¿quién comentó lo de la conciliación familiar de abuelos cuidando hasta de los nietos? Pues ese tipo es un genio, sí señor. Mengano, por fa, pásame una anchoíta de esas, que parece os da vergüenza comerlas, joder.
—Y ya que estamos casi todos, desde Auxilio Social nos transmiten un aumento de personas en riesgo de exclusión y de sin techo. Andamos sufriendo una plaga y explotación migratoria, así que hay que ilegalizar a los inmigrantes, que tenemos los censos descontrolados y no quiero crear más alarma social.
—Ups, menos mal que de fuera no son todo malas noticias, la turisficación de los centros urbanos va creando negocios de caliblablablá...
De esta saldremos, y lo haremos fortalecidos y recuperando los sentidos. Como dice mi amiga Bea, son momentos para dejar de aparentar lo que no se es porque lo que es será lo bueno.
—Oye, que para lo del virus ese, que mi vecino tiene una sulfatadora. ¿Le llamo?
—Por supuesto. ¿Quién se zampa la de la verguenzaaaaa...? Y lo de que quitan Eurovisión, ¡¡¡qué fuerte!!! No tienen vergüenza...
* Este artículo se publicó originalmente en el número 66 (abril 2020) de la revista Plaza
Ha pasado el 9 d'Octubre, otra fecha más en la que la distancia entre alicantinos, castellonenses y valencianos se agranda
Tras más de veinticinco años de trayectoria, en la política y fuera de los focos, Carlos Mazón ha alcanzado la Presidencia de la Generalitat.
Carlos San Juan, de setenta y nueve años, no ha declinado una entrevista en doce meses. Su campaña Soy mayor, no idiota ha conseguido más de seiscientas mil firmas y, más que eso, ha concienciado a los bancos para que den un mejor trato a las personas mayores. Está orgulloso de su lucha, pero este enfermo de párkinson asegura que en cuanto se apruebe la ley, regresará a su vida tranquila