La directora general de Análisis de Presidencia, Ana Berenguer. Foto: GVAVALÈNCIA. El Gobierno valenciano dispondrá en los próximos meses de diversos sondeos que servirán para la elaboración de barómetros que permitan, entre otras cuestiones, evaluar las políticas públicas desarrolladas por el Consell. Unas encuestas -hasta 6.000- que se realizarán presencialmente en el domicilio de los ciudadanos y que estarán a cargo de la empresa GFK-Emer según resolvió el pasado 9 de junio la mesa de contratación compuesta para tal efecto.
De esta manera, tal y como informó Valencia Plaza en febrero, el coste de estas encuestas ascenderá a unos 162.000 euros (IVA incluido, 133.860 sin impuestos) y la ejecución de las mismas tendrá como fecha límite los 18 meses.
Según se especificaba en el pliego, estos sondeos podrán realizarse a través de diversas oleadas, lo que permite intuir que servirán para más de un barómetro y las correspondientes actualizaciones. Material más que suficiente para que la Dirección General de Análisis y Políticas Públicas que encabeza la alicantina Ana Berenguer pueda calibrar qué políticas están calando más en la sociedad valenciana o cuáles son las principales preocupaciones de la Comunitat en distintos ámbitos.
Según el acta colgada en la plataforma de contratación, hasta seis empresas se presentaron a la oferta pública para encargarse de estos estudios demoscópicos. La adjudicataria resultó ser GFK-Emer que ya fue la encargada de realizar informes similares hace tres años para el gobierno valenciano. Así, esta consultora se destacó notablemente de sus competidores en la valoración técnica, superando al resto de aspirantes por al menos nueve puntos de diferencia.
No así en la oferta económica, donde ocupó el quinto puesto en la valoración de este apartado, otro de los criterios para la adjudicación. Sobre esto, en el acta se especifica que la oferta presentada por Merka Star SK, "puede estar incurrida en presunción de anormalidad" por lo que "se acuerda solicitar a la empresa licitadora (...) justificación sobre aquellas condiciones de la oferta que sean susceptibles de determinar el bajo nivel del precio o coste de esta".
Según el número de encuestas encargadas -6.000- y el precio de adjudicación establecido, el precio de la entrevista se situaría en 22,31 euros, si bien en la memoria de la propuesta se especifica que el contrato se ejecutará por precios unitarios en función de las necesidades del órgano de contratación y de la misma manera la ejecución del mismo estará subordinada a dichas necesidades "sin que sea necesario agotar dicha cantidad".
Cabe recordar que el último barómetro hecho público por el Gobierno valenciano data de principios de 2018, siendo presentado por aquel entonces por el director general del área, Julián López, quien abandonó meses después el cargo en dirección a Madrid.
Aquel servicio se licitó entonces por 118.580 euros (con impuestos), aunque finalmente fue adjudicado por 99.220. De esta adjudicación salió el mencionado estudio y otro muy posterior realizado en junio de 2019, el llamado barómetro de verano según señala el número de expediente del estudio. Ambos contaron con 2.000 entrevistas presenciales y se tasaron en 49.610 euros cada uno.
Así pues, solo por el aumento de la oferta y del número de entrevistas totales que se manejan, se entiende que en Presidencia de la Generalitat han decidido pisar el acelerador en cuanto a la agrupación de datos de la opinión pública o, al menos, amasar de manera más regular y continuidad información de lo que piensa la ciudadanía sobre, entre otras cuestiones, la gestión del Gobierno valenciano o las preocupación de los habitantes de la Comunitat.
