Rafael Badenes (anestesista): "Lo más duro fue no tener camas y dar malas noticias por teléfono"

VALÈNCIA. Este jueves se ha celebrado el homenaje de Estado a las víctimas del coronavirus. La ceremonia la preside el rey Felipe VI, y asisten los máximos representantes de las instituciones del Estado, de las instituciones europeas y de la Organización Mundial de la Salud. 

La Presidencia del Gobierno y la Casa Real ofrecieron a las comunidades autónomas la posibilidad de que, junto al president, acudieran otras cuatro personas. En representación de la Comunitat Valenciana, han asistido Ana Santos Martínez, directora de la residencia de personas mayores Santa Elena, de Torrent; Raquel Causanilles, responsable de tienda de Mercadona; Ana Belén Bueno, enfermera supervisora de la Unidad de Hematología del Hospital Clínico Universtario de València, y Rafael Badenes Quiles, jefe de sección de Anestesiología y Reanimación del Hospital Clínico de València.

Precisamente, Badenes ha explicado, minutos antes de la ceremonia,  en Plaza Radio que la asistencia a este homenaje es tanto "un honor como una responsabilidad". Ha asegurado que, realmente, "los verdaderos protagonistas son las víctimas y sus familias, que lo han vivido en primera persona".

Badenes ha relatado lo que han sido, a su juicio, los momentos más duros de la pandemia en su trabajo en primera línea de combate contra la covid-19. "Lo peor fue cuanto no teníamos camas disponibles para asistir a pacientes, unidos a la transmisión de malas noticias vía telefónica", lamenta. 

Por otra parte, cree que el sector sanitario está preparado para una nueva ola de coronavirus. Asegura que, aunque todavía no hay tratamiento para la enfermedad, se maneja con más destreza y conocimiento. "En el manejo global de la enfermedad, tenemos más destreza, en estos momentos tenemos plantes de contingencia en caso de que llegue una segunda oleada", explica. 

Por último, Badenes ha reflexionado sobre la situación de los brotes y la responsabilidad individual. Ha asegurado que se han vivido momentos muy duros y dramáticos, y ha lamentado que, "las personas que no han vivido la enfermedad de cerca, con un familiar afectado, no tomen las medidas de seguridad" sanitaria adecuadas.