VALÈNCIA. (EP). El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, se ha mostrado este jueves "esperanzado" con el programa de gobierno progresista que piensa presentar el martes próximo y que quiere debatir con los grupos, a los que ha pedido "altura de miras" para no verse abocado a convocar elecciones.
Así se ha manifestado en una declaración, sin admitir preguntas, a los medios de comunicación antes de asistir al Pleno extraordinario forzado por Unidas Podemos en el Congreso para que la vicepresidenta Carmen Calvo rinda cuentas por la gestión de la crisis del Open Arms. Se trata de las primeras declaraciones a la prensa desde que retomara su actividad pública visitando la zona afectada por el incendio en Gran Canaria el pasado 22 de agosto.
Apenas unos segundos después de que el portavoz del PNV, Aitor Esteban, reconociera ante los periodistas que no recibe una llamada del Gobierno o del PSOE para verse desde finales de julio, Sánchez ha confirmado que, a partir de la presentación el martes de ese programa para un Gobierno progresista, empezará esa misma semana a reunirse con los partidos.
Pero sobre todo ha querido agradecer a todos los colectivos sociales a los que está viendo este mes de agosto su ayuda y el diálogo que han desarrollado, lo que demuestra, a su juicio, que España tiene una "sociedad civil viva, que quiere que haya un Gobierno que arranque y que responda a muchas de las demandas y problemas que tienen los ciudadanos".
Con las aportaciones de esta sociedad civil, Sánchez y su equipo ultimarán este fin de semana el documento programático que contendrá 300 medidas y que, como avanzaron este jueves fuentes socialistas, incorporará algunas de las promesas electorales de Unidas Podemos.
"Estoy esperanzando porque la propuesta va a ser una propuesta progresista, ambiciosa, reformista, transformadora, modernizadora de nuestro país que va a responder a las tres principales cuestiones que tenemos que responder como país: cómo atajar la desigualdad, cómo crear oportunidades a la gente que no tiene oportunidades y en tercer lugar, cómo podemos modernizar nuestra economía para garantizar un crecimiento sostenido", ha enumerado.
A partir de la presentación de ese programa, ha incidido, el PSOE hablará con los distintos grupos parlamentarios "porque al fin y al cabo, el pasado 28 de abril los ciudadanos fueron muy claros: quieren un Gobierno del Partido Socialista, un gobierno progresista, no quieren que la gobernabilidad de España dependa de fuerzas independentistas que lo que quieren es romper con el Estado español".
"Por eso lo que pido simplemente es responsabilidad, generosidad y altura de miras a todas las fuerzas políticas para no tener que vernos abocados el próximo 23 de septiembre a convocar de nuevo elecciones y podamos tener un Gobierno. Yo creo que los ciudadanos españoles se lo merecen", ha señalado.
A pesar de que el presidente no ha vuelto a reunirse con los partidos desde la investidura fallida de julio, ha sostenido que su Gobierno y su partido están "trabajando" para que haya un nuevo Gobierno y no haya que repetir los comicios. "Me gustaría que también el resto de fuerzas políticas hiciera lo mismo y a ello les convoco. A que a partir de la próxima semana antepongamos los intereses de España a los de cada uno de los partidos políticos", ha zanjado.