VALÈNCIA. El portero internacional español del Athletic Club Unai Simón ha asegurado que fue un "'subidón'" de moral para él recibir el apoyo de la afición tras su error en el primer gol contra Croacia, y cree que su buen partido global se debe a que quería mostrar que su nivel no era el de ese fallo que no evitó el triunfo español y el pase a cuartos.
"Fue un 'subidón' para mí el apoyo de la afición después del error, porque te vienen pensamientos negativos, sobre todo de qué pensará la gente. El tener a la gente animando cada vez que tocaba un balón, aplaudiendo lo que fuera, te da mucha energía y estoy muy agradecido", se sinceró en rueda de prensa.
España necesitó de la prórroga para superar a Croacia (3-5) y, pese a ese error de Unai Simón al no poder controlar un pase atrás de Pedri, y encajar dos tantos más, el guardameta fue clave con varias paradas de mérito.
"Emocionalmente, para mí he vivido partidos en los que he tenido sentimientos más fuertes, sobre todo con el Athletic en partidos de Copa. Pero profesionalmente, ha sido el partido más importante de mi vida y no lo voy a olvidar nunca", asestó.
En cuanto a su error, lo calificó de "accidente sin más". "Pocas veces se dan esos errores, pero cuando los cometemos los porteros se magnifican y acaban en gol. Lo he visto seis, siete veces, me he martirizado un poco. Y no le encuentro el qué, el sol no me molestaba, es que hago mal el control y se me escurre. Tenía mucho espacio para poder controlar bien, intento darle salida al balón con el control y es un accidente, sin más", explicó.
Además, a nivel mental, se conjuró gracias a ese ánimo que recibió para seguir jugando igual, sin irse mentalmente del partido. "Una vez que ocurre eso, el fútbol es así y estás unos minutos pensando en por qué ha pasado eso. Pero es darle la vuelta, porque seguía en el campo y el equipo me necesitaba, tenía que seguir igual, arriesgando. Y ante otro balón así, hacerlo bien", relató.
"Cada día podría decirte que soy mejor portero. En pequeñas cosas puedes mejorar, cada día es una nueva experiencia. Esta fue única, no la había vivido nunca y puede ser especial. Diría que soy mejor portero que ayer, pero peor que mañana", manifestó. "Tenía ganas de mostrar a todo el mundo que no soy el portero del primer gol que encajamos", se sinceró.
"Nos podíamos haber ido a casa con mal sabor de boca, pero darle la vuelta todos juntos dio muestra de la personalidad que tiene este equipo y de lo grandes que somos", comentó al respecto, destacando el poder mental de un grupo unido.
Cree además que los grandes grupos "se forjan en las adversidades". "Lo que me han arropado en el vestuario dice mucho del grupo que tenemos. Los veteranos dicen que estas competiciones las ganan los equipos, no las selecciones. Somos un equipo, no sé dónde llegaremos pero se ve que estamos unidos, y que vamos a ir todos juntos", auguró.
Y en ese barco que rema en una única dirección está al timón Luis Enrique. "Es el principal artífice de esto, es el guía y el que nos indica por dónde tenemos que ir. Tenemos que ir todos de la mano, Luis Enrique nos ha transmitido esto. Estamos muy unidos con él", aseguró.
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