La vacuna contra la covid en Castellón arrancará en dos residencias de Burriana y Almassora
La vacuna contra la covid en Castellón arrancará en dos residencias de Burriana y Almassora
VALÈNCIA. Diez meses después de que el mundo se sumergiera en la vorágine de la covid, uno de los primeros rayos de esperanza para mitigar la pandemia llegará este mes de diciembre a la Comunitat Valenciana. Y es que este domingo, la autonomía empezará a vacunar a los primeros 800 ciudadanos que darán el pistoletazo de salida en el camino de buscar la inmunidad contra el coronavirus y que contempla que 188.000 valencianos estén vacunados en el mes de marzo.
El proceso empezará siete residencias, donde se administrarán estas primeras 800 dosis a usuarios y personal sociosanitario de estos centros. Las primeras dosis llegarán sobre las 9.30 horas a la Comunitat Valenciana, concretamente al centro de distribución de València, desde donde serán remitidas a los siete centros: una residencia pública en Burriana y , una municipal en Almassora en la provincia de Castellón, una privada en San Vicent del Raspeig y una pública en San Joan en la provincia de Alicante, así como una municipal en Rafelbunyol, una concertada en Torrent y una concertada en Benissanó en la provincia de valencia.
El criterio para seleccionar estas residencias es que no tienen ningún brote y en el caso de tenerlo ya han pasado 90 días si tener un caso activo. Posteriormente, se seguirá con las siguientes 110 residencias que están en esta situación: 70 sin brotes y 40 con 90 días sin casos activos. El 15 de enero se quiere haber realizado la oferta de vacunación de la primera dosis a todas las residencias y acabar el mes con 133.000 dosis administradas.
En el caso de que se detecte un brote durante el proceso se analizará la situación concreta de ese centro para determinar si se pueda continuar con el personal no contagiado o, si está muy extendido, es preferible interrumpir la administración de la segunda dosis, que está recomendada a los 21 días, pero si se administra pasado éstos también se da por válida.
Estas unidades, correspondientes a la vacuna de Pfizer, serán el preludio a partir de las cuales llegarán, de forma regular, 30.000 dosis a la semana. En esta primera tanda, que contempla hasta mediados de marzo y que recoge a un total de 188.000 valencianos, se contempla la vacunación a residentes y personal de los centros sociosanitarios, a los sanitarios de primera línea, al resto de profesionales del sistema de salud y a los dependientes de tercer grado.
Esto supondrá 377.000 dosis inoculadas con 21 días de diferencia entre cada una. Cabe recordar que la vacuna no tiene carácter obligatorio, por lo que la Conselleria hará un registro de las personas que rechacen ser vacunadas.
La administración de cada grupo en la primera etapa comenzará cuando se haya concluido la anterior. Así, se empezará por los residentes que serán vacunados por el propio personal del centro. El equipo debe estar constituido por al menos un médico para controlar si se produce algún efecto adverso inmediato y dos enfermeras. En caso de que faltara personal sería cubierto con profesionales de Atención Primaria y conselleria siempre enviará una enfermera coordinadora para supervisar el proceso.
Por su parte, el personal sanitario será vacunado en sus propios centros, mientras que los profesionales de Atención Primaria se desplazarán para vacunar a los grandes dependientes en sus domicilios. En esta primera etapa la Conselleria de Sanidad no prevé contratar más personal ni contempla que los farmacéuticos intervengan en ninguna etapa del proceso de vacunación como han solicitado.
No obstante, sí que se contempla que en el caso de que fuera necesario reforzar la plantilla para los siguientes grupos de población la intención de Sanidad es recurrir a la contratación por módulos en jornada extraordinaria, como ya ha hecho estos meses para la vacuna de la gripe. En cualquier caso, dependerá de a cuántas personas y en cuánto tiempo se debe vacunar y el ritmo al que llegan las dosis, que podrían aumentar si la Unión Europea diera el visto bueno a la vacuna de Moderna el 6 de enero.
La Conselleria de Sanidad ha garantizado que el cumplimiento de la cadena de frío para que en caso de que se diera alguna reacción adversa solo pueda atribuirse a la propia vacuna. Para ello, cuenta con tres centros de almacenaje, uno por provincia, con congeladores capaces de mantener a menos de 70º las dosis.
No obstante, las primeras 800 dosis llegarán refrigeradas, entre 2 y 8º, para que puedan su administración inmediata en los siete centros. En estas condiciones la vacuna dura cinco días, mientras que si están ultracongelada puede almacenarse durante unos 30 días. A temperatura ambiente se descongelan en unos 30 minutos y una vez reconstituidas debe inocularse en dos horas.
La vacuna contra la covid en Castellón arrancará en dos residencias de Burriana y Almassora