Jorge Alarte, Joan Calabuig y Alfred Boix, suenan para acceder a responsabilidades en Madrid. Foto: VPVALÈNCIA. Han pasado casi siete meses desde que las elecciones generales tuvieron lugar. El resultado arrojó un reparto de escaños que dificultaba la construcción de una mayoría suficiente para la investidura de cualquier candidato. El socialista Pedro Sánchez fue el que finalmente pudo resolver el sudoku a su favor y ser reelegido presidente del Gobierno de España de nuevo en noviembre del año pasado.
Tres meses después, todavía quedan puestos que nombrar en el Ejecutivo, especialmente en lo que se refiere a organismos autónomos y empresas públicas. Pero los cargos vacantes se van reduciendo y todavía quedan muchos aspirantes en el fondo de armario del PSOE a los que les gustaría incorporarse al Gobierno central.
Entre los socialistas valencianos, diversos nombres son los que salen a relucir en las quinielas de la mayoría de dirigentes consultados. No son nombres al azar, este diario ha contrastado que, efectivamente, en Madrid también han llegado ecos de que algunos de ellos tienen posibilidades de sumarse de alguna manera, aunque sea en un puesto de impacto limitado, al Gobierno de Sánchez.
Uno de ellos es Jorge Alarte. Ex secretario general del PSPV, fue llamado por Ximo Puig durante su segundo mandato para convertirse en director general de Relaciones con las Comunidades Autónomas y Representación Institucional. Un puesto en el que, así coinciden distintas fuentes socialistas, rindió de forma satisfactoria, desempolvando su agenda de contactos en Madrid -amasada durante su etapa como líder del PSPV- y abriendo más de una puerta para Puig en el Gobierno de España. Es por ello que muchos consideran que Alarte podría tener algún espacio en la presente legislatura dentro del entramado estatal.
Otro nombre que muchos mencionan es el de Joan Calabuig. Presidente del Puerto de Valencia en la recta final de la legislatura pasada, apenas pudo disfrutar del cargo por la inesperada derrota electoral de los socialistas en la Comunitat. Diputado en Les Corts en los años 80; el Europarlamento es la cámara donde posiblemente estuvo más cómodo. Posteriormente pasó por el Congreso hasta convertirse en candidato a la Alcaldía de València, donde no pudo con Rita Barberá en 2011 y 2015. Finalmente, recaló en Presidencia bajo las órdenes de Puig como secretario autonómico para la Unión Europea y Relaciones Externas de la Generalitat Valenciana, antes de recibir la misión por parte de Puig de situarse al frente del Puerto. No son pocos en el PSPV los que opinan que la trayectoria de Calabuig merecería algún reconocimiento en Madrid.
También suena como una posible incorporación en algún puesto en la capital de España el nombre de Alfred Boix. En la última legislatura ejerció como secretario autonómico de Promoción Institucional y Cohesión Territorial dentro del equipo de Presidencia liderado por Puig. No obstante, conviene recordar que el también exdiputado nacional, provincial y autonómico, fue en su día secretario de Organización del PSPV-PSOE: el que tuvo, retuvo y mantiene contactos, así lo apuntan varios dirigentes socialistas, que pueden confiar en él para dejar su actual puesto de asesor en Valencia y ocupar algún espacio en Madrid.
En las últimas horas, se ha conocido que el expresidente de la Generalitat Ximo Puig deja su acta de senador para tomar rumbo a París como embajador delegado ante la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), puesto cuyof nombramiento se confirmó este martes en el Consejo de Ministros. Además, tal y como informó este diario, está previsto en los próximos días que el hasta ahora jefe de Prensa de Puig, Pere Rostoll, se incorpore al área de Comunicación del Ministerio de Transporte dirigido por Óscar Puente.
