VILA-REAL (EFE). Carlo Ancelotti, técnico italiano del Real Madrid, se deshizo en elogios hacia el brasileño Vinicius Junior, del que aseguró que a sus 22 años ya está "marcando una época en el Real Madrid y en el fútbol", y le demandó "continuidad" como único punto de mejora.
"Vinicius, a parte de lo futbolístico, está marcando una época en el Real Madrid y en el fútbol en general. Todo el madridismo espera que siga así porque está haciendo cosas muy importantes", aseguró en rueda de prensa.
"Su techo es la continuidad que tiene que tener. Le va a ayudar mucho el físico que tiene. Es muy fuerte, muy potente, nunca está cansado, siempre se entrena a tope. El techo para él y los grandes futbolistas que marcan la diferencia en el fútbol actual, es la continuidad", añadió.
Restó importancia Ancelotti a los comportamientos de 'Vini' en gestos, celebraciones, piques con los rivales después de la última imagen del clásico del Camp Nou, cuando lo tuvo que sustituir goleando al Barcelona porque se podía perder la final si recibía una segunda cartulina amarilla.
"El pique en un partido con rivalidad fuerte es normal, como son todos los clásicos que hay enfrentamientos ente jugadores", justificó.
Brilla de nuevo junto a Vinicius en ataque el francés Karim Benzema, de quien Ancelotti resaltó el trabajo que ha hecho para recuperar la finura en el remate y acercarse a la identidad que fue decisiva el pasado curso.
"El trabajo individual que ha hecho ha sido entrenar muchas veces para mejorar frente a la portería. Después ha tenido más confianza, es más paciente ante la portería, en el uno contra uno y en la finalización. Lo ha manejado muy bien él, nosotros sólo le hemos preparado trabajo individual específico para intentar mejorar el tiro final", reconoció.
El 0-4 en el Camp Nou con el que su equipo firmó el pase a la final de la Copa del Rey, lo situó Ancelotti entre los diez mejores partidos que ha dirigido como entrenador.
"Está en un sitio importante. A nivel futbolístico la pongo en un sitio muy alto, en los primeros diez de todos mis partidos teniendo en cuenta que hay muchas finales con peor juego pero un recuerdo muy bonito", valoró.
El desgaste físico y la tensión que conlleva la disputa de un clásico, provocó cansancio reconocido por Ancelotti en sus jugadores. A días del duelo europeo ante el Chelsea, el técnico italiano dejó entrever rotaciones pero dando importancia a LaLiga.
"Estamos todavía con un poco de cansancio pero no tenemos problemas. Todos salvo Mendy están disponibles. Evaluaremos mañana el cansancio e intentaremos meter el mejor equipo para seguir peleando por LaLiga hasta el final", dijo.
Pese a los doce puntos de ventaja, aseguró Ancelotti que no cambiaría su situación por la de Xavi tras clasificarse para la final de la Copa del Rey y seguir con vida en la Liga de Campeones.
"Entrenar al Barcelona es imposible para mí, por lo que no me cambiaría por Xavi. Le tengo mucho respeto al Barça y a Xavi pero no me quiero cambiar por nadie porque estoy en el mejor club del mundo, donde la gente me quiere mucho. Tengo mucha ilusión porque la temporada está muy viva, vamos a jugar la cuarta final y tenemos desventaja en Liga porque ellos lo han hecho muy bien y nosotros cuatro puntos menos que el año pasado".
"Si acabamos ganando más títulos, será una temporada espectacular, pero tenemos la ilusión viva en LaLiga. Se dice que no pensamos en ella pero sí lo hacemos porque ayuda a tener una buena dinámica y ambiente. Hasta que la matemática nos condene, vamos a pelearla", añadió.
Comparando el presente con la pasada campaña, el técnico italiano siente aún mejores sensaciones por el carácter mostrado por sus jugadores en situaciones adversas.
"Los partidos que hemos remontado nos dan una confianza que el año pasado había pasado una sola vez, ante el PSG. Ahora, el hecho de que ha pasado muchas veces, nos da mucha confianza. Veo el ambiente de los jugadores unido, enchufados e ilusionados también los que no juegan. Esto es bueno para nosotros", sentenció.
El triunfo del Real Madrid en el clásico copero del Camp Nou, el segundo más amplio de la historia en casa del Barcelona, no lo interpreta Carlo Ancelotti como una reivindicación y aseguró que tras dirigir "1272 partidos", no tiene "que demostrar nada a nadie".
"Miré de casualidad el otro día el número de partidos antes del Barcelona. No sabía cuál era el número pero pensaba que estaba cerca de 1300 y cuando llegue tendré que celebrarlo un poco", aseguró en rueda de prensa.
"Lo que pienso es que después de 1272 partidos, no tengo que demostrar nada a nadie. Todo el mundo me conoce y me puede evaluar, pero no tengo que demostrar nada a nadie", manifestó.
Pese a la goleada 0-4 en el Camp Nou, a Ancelotti no se le vio especialmente feliz después de días en los que escuchó que si no ganaba un título considerado entre los tres grandes, no continuaría al mando del Real Madrid. El técnico italiano explicó la razón de su comportamiento tras sentir tanta presión.
"Estoy muy bien, tranquilo, ilusionado y con mucha motivación porque el equipo está bien. Mi humor depende mucho de cómo está el equipo. Lo veo muy bien y a nivel personal estoy igual, no tengo problemas. A veces, después del partido, uno está tan cansado que solo quieres quedarte tranquilo. En un partido como el miércoles hay mucha presión antes y durante, y cuando acaba te viene el cansancio y solo tienes ganas de descansar", explicó.
Con su experiencia, Ancelotti admite la crítica y entiende que mucha gente dudase sobre su continuidad. "No me sorprende (la duda). Es nuestro trabajo. Estamos en el foco, es bastante normal y no tengo ningún problema".
Horas después de uno de los triunfos más importantes de la temporada y con la mejor segunda parte del curso, Ancelotti confesó que el día libre que concedió al equipo y que tanto celebraron sus jugadores en el vestuario visitante del Camp Nou, él lo aprovechó para ir con su mujer "a la casa de campo en bici".