CASTELLÓ. La Asociación Nacional de Fabricantes de Fritas, Esmaltes y Colores Cerámicos (Anffecc) ha emitido este lunes un comunicado relativo a la situación del sector con respecto a la pandemia de coronavirus, el estado de alarma y las medidas proclamadas por el Gobierno para hacer frente a este tema. En el mismo expresan, en primer lugar, su disposición para ponerse al servicio de las autoridades en esta emergencia. Así, señalan que "desde Anffecc queremos mostrar nuestro apoyo a todo el colectivo médico, Gobierno Central y Autonómico, poniéndonos a su servicio en todo cuanto podamos ayudar para conseguir superar esta situación".
Del mismo modo, indican que las empresas del sector "están plenamente comprometidas con este tema y se están siguiendo protocolos de seguridad extremando las medidas de higiene y prevención para evitar posibles contagios". Esto implica no sólo implementar medidas dentro de las plantas, sino también la restricción de visitas, reuniones físicas, viajes, etcétera. Para ello, "se ha preparado y difundido un documento interno de la Asociación con sugerencias para que nuestras empresas puedan implementar todas las medidas necesarias en sus instalaciones".
Sobre las medidas aprobadas por el Gobierno, desde Anffecc señalan que les parecen "medidas positivas, en su mayoría", pero consideran que "se deben revisar algunas de las aprobadas, así como implementar otras para poder garantizar el correcto funcionamiento del tejido empresarial de nuestro sector y el español en general". De hecho, insisten en que es imprescindible "dotar de liquidez al sistema para poder mantener la actividad de nuestras empresas, como hasta ahora".
Así, en cuanto a las medidas referentes a la suspensión temporal de trabajadores (ERTEs), indican que “hacen referencia a casos directamente relacionados con el contagio del Covid-19, dejando de lado cuestiones fundamentales para nuestras empresas como la pérdida de pedidos provocadas por las restricciones de terceros países o las restricciones de entrada de personas a determinados países, lo que dificulta, sobremanera, la labor comercial de nuestras empresas". Inciden en que estas situaciones, que se darán "no han sido previstas en el Real Decreto-Ley 8/2020 y, sinceramente, son las que la industria esperaba ver reflejadas para seguir manteniendo su competitividad".
Por ello, esperan que el Gobierno sea consciente de que "mantener y proteger al tejido empresarial español, será la mejor de las armas para garantizar los puestos de trabajo y evitar, en la medida de lo posible, despidos temporales”. Por ello, solicitan “se revise y modifique el significado de ‘fuerza mayor’ en los ERTEs, considerando, también, otra serie de situaciones - que consideran las más probables- referentes a pedidos, ventas, distribución, etc… que deberían ser incluidas bajo dicho término".
Igualmente, echan en falta algún tipo de ayuda para aquellas empresas que consigan superar esta situación sin despidos: "Se están incentivando los ERTEs, cuando lo que más se debería incentivar sería la ausencia de ellos". Además, medidas para suavizar la carga impositiva: "Consideramos que falta mucho camino desde el punto de vista fiscal y tributario, debiéndose suavizar los requisitos actuales de las empresas y la presión fiscal, tanto desde el punto de vista del gobierno central como autonómico”.
No obstante, a pesar de echar en falta más apoyo desde la administración hacia el tejido empresarial, desde Anffecc quieren destacar especialmente "el gran comportamiento que está teniendo el conjunto de los ciudadanos españoles ante la situación que se está viviendo".
Desde el colectivo igualmente solicitan que haya coherencia en los gobernantes y que todos los grupos políticos "actúen en consecuencia, adoptando medidas coherentes con la realidad que actualmente tenemos. No es momento de campañas políticas sino de actuar con responsabilidad mediante la adopción de medidas que protejan el futuro de las empresas españolas en su conjunto".