VALÈNCIA (EFE). La Asociación Nacional del Taxi (Antaxi) considera que el real decreto ley sobre concesión de licencias estatales de vehículos de alquiler con conductor (VTC) aprobado por el Gobierno la pasada semana es una "mejora" hacia la consecución de un transporte urbano sostenible, aunque tiene todavía cuestiones "desatendidas".
"Tras más de doce años de caos regulatorio en el transporte, esta norma es lo más cercano que ha habido a nivel nacional a un intento real de ordenar el transporte en base a cuestiones de interés general", dice la asociación.
Añade que era necesaria una regulación "urgente" para evitar el "impacto descontrolado de la revisión de decenas de miles de autorizaciones de VTC cuya denegación estaba recurrida, y que hubieran supuesto un tremendo 'shock' para el sistema de transportes y las condiciones viarias de nuestras ciudades".
Antaxi señala que las peticiones de licencias se habían incrementado tras la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) en relación con la ordenanza de transporte del Área Metropolitana de Barcelona (AMB), lo que revela el "juego táctico que usan las empresas de VTC para inundar las calles con sus coches".
La sentencia del TJUE establecía que la limitación de licencias VTC a una por cada 30 de taxi en el AMB no se ajustaba al derecho europeo. Concretamente, esa limitación no está justificada por ninguna razón imperiosa de interés general, ya que lo que busca es garantizar la viabilidad de los servicios de taxi, algo que supone un motivo de carácter puramente económico, alega la Corte europea.
El real decreto aprobado por el Gobierno restringe la concesión de licencias VTC por criterios de tráfico o medioambientales, aunque la norma no afecta a las licencias urbanas, que dependen de las comunidades autónomas y que son las que realmente marcan la diferencia en las grandes ciudades.