CASTELLÓ. El colegio Embajador Beltrán de Almassora ha iniciado la mudanza al nuevo bloque con el empaquetado de todos los enseres y materiales que la empresa constructora del centro trasladará durante esta semana al edificio nuevo. La mudanza permitirá derribar el viejo bloque, que da a la calle Santo Cristo, y así iniciar en ese punto la construcción de las pistas deportivas. De esta forma, Almassora estrenará el complejo educativo coincidiendo con el inicio del curso escolar el próximo 12 de septiembre.
Las concejalas de Educación y Juventud, Raquel Barberà y María Luisa Renau, respectivamente, han visitado el centro para conocer el cronograma de trabajo marcado por la constructora Añil. No en vano, su contrato de adjudicación de las obras del Embajador Beltrán incluye el traslado del mobiliario al nuevo recinto, que está ya en la fase final de la edificación.
Así, los operarios de la firma que también ejecutó las obras del colegio Regina Violant de Almassora se encargarán durante los próximos días de recoger todos los materiales embalados por la comunidad educativa en cada una de las clases del viejo edificio principal para depositarlas en las nuevas dependencias. La mudanza quedará almacenada en espacios comunes y amplios como el comedor hasta que acaben los últimos detalles de la construcción.
Este ritmo de trabajo permitirá que los operarios especializados en el derribo puedan acceder con la maquinaria pesada hasta el edificio de 1961, que quedará reducido a escombros en unos días. El espacio que deje lo ocuparán desde agosto las pistas deportivas en una nueva distribución de los espacios tras ampliar el recinto hasta los 5.700 metros cuadrados. El complejo educativo ofertará 468 plazas a partir del próximo curso, casi un centenar más que hasta la fecha.
La alcaldesa de Almassora, Merche Galí, ha agradecido la comprensión a la comunidad educativa, que acaba de finalizar así “un curso complicado por las dificultades para compaginar las obras con las clases” y al vecindario del barrio, “que ha mostrado gran generosidad para garantizar un espacio temporal de patio al alumnado en la calle y la plaza y soportar las molestias de unas obras muy necesarias”.
Añil acomete así el 20% restante de la construcción del Embajador Beltrán, que sigue el diseño elaborado por el bufete valenciano Durán Moreno Arquitectos, ganador del concurso de ideas lanzado desde el Ayuntamiento de Almassora. Las obras cuentan con un presupuesto de 4.945.112,42 euros.