CASTELLÓ. La solución planeada por el Ayuntamiento de Castelló para remodelar el Camí la Ratlla contempla desde una calzada de doble sentido de seis metros de ancho hasta un carril bici de 50 centímetros. El proyecto, presupuestado en 1,2 millones de euros, propone reformar 1,77 kilómetros del vial, aunque la ejecución resulta heterogénea dada la singularidad de los tramos.
La actuación se define en dos ejes, según el pliego de prescripciones técnicas y administrativas. El más importante va desde la carretera CV-149 hasta el camino del Serradal. En total, 1.366,3 metros. Como características más reseñables aparecen, por un lado, un recorrido peatonal junto a la acequia y, por otro, una carretera con un carril en cada dirección y el mentado itinerario cicloturista.
El trazado del vial se adecua a las necesidades del tráfico rodado, ajustándose al corredor viario existente. Del mismo modo, se respeta la rasante de los accesos de las distintas obras de paso sobre la acequia, por los que se accede a los caminos y a distintas propiedades. Por otro lado, se propone una barandilla para dotar al trayecto peatonal de las condiciones de seguridad en cumplimiento de la normativa vigente.
Respecto al segundo eje, desde el camino Serradal hasta el final, solo se actúa para completar el recorrido a pie hasta conectar con la acera existente en la zona ya urbanizada. La sección tipo consiste en la construcción de un andén sobre el espacio actual entre la línea blanca del borde de la calzada y el cajero de la acequia. En el punto final, al encontrarse el canal tapado, se amplía el ancho del bordillo que pasa a disponerse sobre el forjado de cierre de la cequeta.
Otro aspecto importante del proyecto está relacionado con la zona ajardinada, que no solo tiene una función decorativa. Así, se dispone de dos bandas para la separación de la calzada con respecto al carril bici y al recorrido peatonal, mejorando así la seguridad para los usuarios. La composición paisajística presenta algunas especies arbustivas de bajo crecimiento para que no precisen un mantenimiento, tales como tomillo, manzanilla o romero.
En las zonas de mayor ancho se considera adecuado apostar por ejemplares arbustivos de mayor tamaño, incluso arbóreos, que no afecten a la circulación de los vehículos que transiten por la carretera. Como ocurre con los grupos de menor porte, se recomienda utilizar variedades autóctonas para facilitar una mayor integración al entorno.
Una vez publicado el pliego, las empresas interesadas tienen de plazo hasta el 22 de diciembre para presentar ofertas. Al tratarse de un contrato mayor, las concurrentes deberán formalizar sus propuestas de manera fraccionada, atendiendo a criterios documentales, económicos y técnicos. La adjudicación se conocerá dentro del primer trimestre de 2021. Considerando que la ejecución se prolongará por espacio de 10 meses, la reforma no estará acabada antes de final del próximo año, en el mejor de los casos.