Roberto Centeno (i.), socio fundador de Atitlan, y Olallo Villoldo, presidente de GrupotecVALÈNCIA. La firma inversora Atitlan y la ingeniería valenciana Grupotec vuelven a unir fuerzas para iniciar un nuevo proyecto empresarial. Si hace unos años se aliaron para el desarrollo de parques fotovoltaicos, en esta ocasión cambian de sector y ponen el foco en la promoción inmobiliaria. Concretamente, invertirán en el segmento 'living', que incluye activos relacionados con espacios compartidos como el coliving o senior living, así como el desarrollo de build to rent (BTR), construir para alquilar. Se trata de nuevas fórmulas residenciales que en los últimos años están despertando con fuerza el 'apetito' inversor ante el cambio de estilo de vida y hábitos de la sociedad y la falta de oferta en la mayoría de plazas españolas.
Para ello, ambas compañías han constituido la sociedad Living Investment Partners Spain SL, con un capital de 3.000 euros. Su objeto social no da lugar a dudas: "La adquisición, enajenación, explotación comercial, arrendamiento, arrendamiento financiero y subarrendamiento, directamente o por medio de terceros, de terrenos, edificios, locales, viviendas y cualesquiera otros bienes inmuebles y fincas rústicas o urbanas". Los administradores mancomunados designados son César Alejandro Moreyra, director general de Grupotec; Agustín Pérez, gerente de inversiones en Atitlan; y el abogado Luis Giménez-Arribas, según consta en el Boletín Oficial del Registro Mercantil (Borme).
Por el momento, según apuntan fuentes de la firma propiedad de Roberto Centeno y Aritza Rodero, no existe ningún proyecto concreto y la sociedad carece de actividad. "Se están explorando oportunidades para invertir en proyectos de coliving, senior living o alquiler, pero no hay nada definido todavía", explican desde Atitlan. "Estas fórmulas alojativas son una tendencia en el mercado y se han identificado oportunidades, por lo que se quiere entrar en este segmento", insisten.
Asimismo, desde Grupotec confirman a este diario la búsqueda de oportunidades en el Real Estate, pero eluden dar más detalles a la espera de acometer alguna transacción. A priori, este sería un primer salto al residencial de la ingeniería valenciana, centrada en las renovables, proyectos logísticos y el sector industrial. Por tanto, con la creación de la mercantil ambas compañías pretenden anticiparse al cierre de alguna operación atractiva en el mercado en un momento de dinamismo de este tipo de producto.
Y es que solo en 2022 el segmento living acaparó el 21% de toda la inversión inmobiliaria en la Comunitat Valenciana, cerca de 195 millones de euros de los 910 millones transaccionados aquel año, según datos de la consultora CBRE. Un volumen que supone el doble que la inversión del año anterior y en el que destacó con fuerza el build to rent, es decir, la obra nueva para el alquiler.
Con esta alianza, ambas compañías repiten sinergías. Hace ya unos años que el grupo que preside Olallo Villoldo y Atitlan se unieron para desarrollar parques fotovoltaicos en diferentes puntos de la geografía española. Con aquel proyecto, la pretensión fue poner en marcha diferentes plantas con una potencia de 1,5 gigavatios. De hecho, la firma inversora lleva años con el foco puesto en las renovables, a través del holding Atitlan Helios SL, creado para agrupar su negocio energético.
No obstante, la firma de Rodero y Centeno tiene actividad en otros sectores y el inmobiliario es un viejo conocido. Así, actualmente cuenta con la sociedad inmobiliaria Nuevas Actividades Urbanas (NAU), con participación en centros comerciales de la ciudad de València como Aqua y Arena y otros en la provincia como el Osito Park. En concreto, tiene en cartera Oceanic Center, la empresa que posee el complejo comercial, hotelero y de ocio Aqua Multiespacio junto a los Montoro a través de la firma Navisa.
También, forma parte de NAU la mercantil Valencia Natura Park, propietaria del centro comercial Arena Multiespacio, también al 50% con los Montoro. Lo mismo ocurre con Osito Park, propietaria de terrenos junto al centro comercial El Osito de la Eliana.
Además, hace un año vendieron un suelo junto a Área Desarrollo, división de proyectos inmobiliarios del Grupo Simetría y propiedad de la familia Batalla, a la británica Round Hill Capital para una residencia de estudiantes con 250 camas en la avenida de Tarongers. La operación rondó los 25 millones de euros.
