VALÈNCIA. El técnico del Valencia, Rubén Baraja, que esta semana cumple un año en el cargo, ha volteado la mala dinámica previa a su llegada y ha acercado al club a su porcentaje histórico de triunfos, con un 42,2% de victorias en sus primeros 45 partidos, aunque no ha logrado que deje de perder tantos encuentros.
Con la derrota de este pasado sábado ante Las Palmas, Baraja, que se hizo cargo del Valencia el 14 de febrero de 2023, ha conseguido en su primer año diecinueve victorias, nueve empates, un 20%, y diecisiete derrotas, un 37,7%.
Son números que están alejados de los mejores técnicos de la historia del club, pero que a la vez distan mucho de las pobres cifras de antes de su llegada al haber logrado pasar muchos empates a triunfos, aunque tanto él como sus predecesores de las tres campañas anteriores han cogido plantillas con un presupuesto notablemente a la baja.
La media del club de Mestalla en los 4.150 encuentros oficiales de su historia es del 47% y aunque con Baraja aún está cinco puntos porcentuales por debajo lo cierto es que el entrenador ha logrado subir trece puntos porcentuales porque se hizo cargo de un equipo que tenía un 29% de victorias en los 45 partidos anteriores a su llegada.
De hecho, en esos encuentros previos a que llegara el exjugador valencianista, el equipo sólo consiguió trece victorias, empató quince encuentros y perdió diecisiete ocasiones (37,7%), una deriva deportiva que llevó al equipo a luchar por la permanencia, hecho que consiguió en la última jornada de Liga.
Así, el Valencia inmediatamente anterior a Baraja perdía igual que el actual pero ganaba un 18% menos de partidos que lo que históricamente lograba el equipo de la capital del Turia, casi cinco puntos menos que la media histórica.
De los 32 técnicos que han dirigido al Valencia en al menos 45 encuentros, el vallisoletano es el vigésimo séptimo con más victorias, con 17, lejos de las 22 de Rafa Benítez o de las 25 de Luis Aragonés. No obstante, su porcentaje del 42,2% es mucho mejor que el 31,82% de triunfos de Gennaro Gattuso, el 37% de José Bordalás y Albert Celades o el 29% de Javi Gracia, los predecesores más inmediatos del exjugador del Valencia.
Por tanto, aun lejos de llegar a la senda de los entrenadores con mejores números de la historia del club, el vallisoletano ya ha cambiado la dinámica y también las sensaciones de un equipo que el año pasado se vio abocado a pelear por eludir el descenso y que esta temporada está noveno a falta de catorce jornadas.
El gran debe, sin embargo, del vallisoletano es el elevado porcentaje de derrotas que mantiene su Valencia. En los 45 choques pre-Baraja, el equipo perdió diecisiete encuentros, los mismos que con él en el banquillo, lo que hace que la media de derrotas del Valencia en sus últimos 90 encuentros sea de 37,8%, siete puntos porcentuales más que el promedio histórico del club, que es de 30,6%.
Así, con esta dinámica, el actual Valencia pierde unos siete partidos más cada cien que lo que históricamente lo hace. De hecho, sólo hay cuatro técnicos -de esos 32 que han dirigido al Valencia en al menos 45 encuentros- que hayan perdido más de diecisiete veces en sus primeros 45 choques, se trata de Luis Miró (20), Ramón Encinas (19), Alejandro Scopelli (18) y Carlos Iturraspe (18),
En cualquier caso, Baraja conoce la exigencia histórica del club y, de hecho, en sus 362 encuentros como jugador del Valencia logró 180 victorias (49,7%), 94 empates y sólo 88 derrotas (un 24,3%), por lo que conoce y de hecho ha asumido como propias públicamente en varias ocasiones las reivindicaciones históricas de un Valencia al que ha dotado de identidad, y ha aumentado su porcentaje de triunfos pero que sigue perdiendo demasiados encuentros para poder competir por cotas más altas en la clasificación.