VALÈNCIA. El Institut Valencià de Cultura (IVC) encara una nueva fase en el proceso de selección de sus tres directores adjuntos, tras la decisión de la Conselleria de Cultura, liderada por Vicente Barrera (Vox), de cesar a Francesc Felipe, director adjunto de Audiovisuales y Cinematografía; Marga Landete, directora adjunta de Música y Cultura Popular, y Roberto García, director adjunto de Artes Escénicas. Fue a principios de enero cuando se inició el proceso de selección, que ha interesado a una veintena de candidatos, principalmente en el área de Música, que suma hasta doce aspirantes. Con el plazo cerrado, ahora toca enfrentarse a las entrevistas y, para ello, hace falta un comité de selección que todavía estaba por concretar. Hasta ahora.
Esta misma semana se ha configurado la comisión de valoración, que está formada, tal y como especifican las bases del proceso, por tres personas expertas en las materias y tres representantes de la sociedad civil seleccionadas “a propuesta de instituciones de ámbito cultural”. Entre las instituciones en cuestión se encuentra la Real Acadèmia de Cultura Valenciana (RACV), con la que el nuevo gobierno recuperó relaciones tras años de Botànic, que ha propuesto al barítono Pedro Quiralte, vinculado al Partido Popular, pues en 2019 encabezó la candidatura del partido al Ayuntamiento de Benafigos, y al músico Salvador Chulià, que entre 1993 y 2014 fue director del Conservatorio Municipal de Música ‘José Iturbi’. Desde el Consorci de Museus, la otra institución elegida para designar a miembros del comité, se ha propuesto dos nombres: el actor Jaime Pujol y el poeta y catedrático Jaime Siles, que en 2014 fue nombrado autor del año por la Conselleria de Educación, Cultura y Deporte y, entre otras cosas, fue director de publicaciones de las RACV.
La tercera institución cultural elegida es la Universitat de València, que ha propuesto para el comité de selección a Antoni Tordera, quien fuera director del Centro Dramático de la Generalitat Valenciana o del festival Medieval de Elche, y a la catedrática, especialista en el teatro del Siglo de Oro y exdirectora general de Patrimonio Cultural de la Generalitat Valenciana, Evangelina Rodríguez. De igual forma, al comité de selección también se sumará un representante de la Secretaría Autonómica de Cultura y Deporte, otro de la Dirección General de Cultura y un tercero de la Dirección General de Patrimonio Cultural.
Cabe destacar que la comisión de valoración será la encargada de seleccionar a los tres directores adjuntos, no hay una comisión por cada área. Los miembros, de acuerdo con la Conselleria, han sido elegidos por “unanimidad”, una elección que dará paso a las entrevistas, que tendrán lugar la próxima semana. Las caras elegidas para el comité es un asunto clave en un concurso que, a diferencia de las convocatorias impulsadas anteriormente, no determina el peso que tendrá el proyecto o la entrevista personal en la decisión final, anteriormente fijado en un 60-40 por ciento. Será, pues, la comisión la que sin nota objetiva valore cada proyecto.
Fue el pasado mes de octubre cuando este diario desveló la intención de la Conselleria de Cultura de cesar a los tres directores adjuntos, un cese que se efectúa cuando todavía quedaban años para la finalización de sus contratos. Dos de ellos, de hecho, continuaban en el cargo tras una reciente prórroga de su contrato, como es el caso de Marga Landete y Roberto García, pues ambos accedieron a sus puestos en el año 2017 con un contrato que fue renovado por el Consejo de Dirección del IVC en 2022 por otros cinco años. En ese mismo año accedió a la dirección adjunta Francesc Felipe, también con un contrato por cinco años. El cambio de gobierno tras las elecciones autonómicas puso sobre la mesa varios cambios en el tablero cultural, cambios que pasan por el cambio de caras casi total en el organismo.
La razón del cese la explicó el propio vicepresidente primero y conseller de Cultura, Vicente Barrera, durante una entrevista con este diario. “Si usted ve la programación del IVC, mucha de ella ha sido politizada durante todos estos años. No creemos que sea justo, lógico ni asumible que con el dinero de todos se haga política y se intente colonizar conciencias. Nosotros creemos que la cultura, cuando además está pagada con dinero público, no tiene que ser un medio político. Y esto es lo que se ha hecho desde estas tres direcciones artísticas o hemos entendido que se ha hecho. Queremos ir hacia una cultura blanca, donde no sea un arma de colonización de conciencias y de adoctrinamiento político”, declaró. En cualquier caso, el cambio con respecto al anterior gobierno no será total, pues la conselleria de Vox sí mantendrá en el cargo al director general del IVC, plaza ocupada por Abel Guarinos desde 2016.