CASTELLÓ. Becsa arrancará en marzo las obras de urbanización de 24.754,04 metros cuadrados en el entorno del Grupo Perpetuo Socorro de Castelló. Se trata del desarrollo de la unidad de ejecución 55-UE-R, que limita al norte con la avenida Campo de Montiel, al sur con las calles Larga e Infantes, al este con la carretera de Almassora y al oeste con el vial V-7. La actuación tiene un presupuesto de 992.046,48 euros y un plazo de ejecución de 9 meses a contar a partir de la firma del acta de comprobación de replanteo, un acto jurídico en el que la adjudicataria legitima la disponibilidad de los terrenos.
Los trabajos consisten en las alineaciones de las parcelas para futuras edificaciones, el acabado de los anchos de las calles y la disposición de superficie de zonas ajardinadas y espacios libres. El tratamiento del suelo público se define adoptando como criterio general el predominio de los elementos naturales sobre las zonas pavimentadas, lo que minimiza los costes de construcción y mantenimiento.
En cuanto a los viales, las mejoras se acometen en función del uso que se les asigna para resolver los problemas de movilidad, con especial incidencia en la confluencia de las calles Infantes y Larga, del Grupo Perpetuo Socorro. Así, se establecen diferentes categorías, que incluyen zonas peatonales, de tráfico rodado, aparcamiento y carril bici.
Del mismo modo, el proyecto recoge la implementación de los servicios mínimos, como la red de saneamiento y drenaje, abastecimiento de agua, suministro eléctrico, telefonía o alumbrado público. La memoria descriptiva del proyecto, asimismo, subraya la necesidad de realizar demoliciones, cerramientos y movimientos de tierras con el propósito de definir los rasantes.
La urbanización de la 55-UE-R está pendiente desde 2006, cuando la mercantil Jardines de Castalia se hizo con la concesión tras aprobarse el Programa de Actuación Integrada (PAI) en sesión plenaria el 23 de febrero de ese año. El 15 de abril, la Conselleria de Territorio y Vivienda subdividió la unidad de ejecución en tres secciones para facilitar la edificación. El 16 de octubre de 2009, la Junta de Gobierno local aprobó definitivamente el proyecto de reparcelación del entorno de Perpetuo Socorro. Eso implicaba que las operaciones debían comenzar en un mes como máximo, teniendo que ser ejecutadas antes de un año, según el pliego de prescripciones técnicas y administrativas.
Sin embargo, la adjudicataria incumplió los plazos, por lo que el Ayuntamiento de Castelló inició los trámites para declarar la resolución del contrato el 16 de noviembre de 2011. Un mes después, la empresa solicitó la suspensión temporal de la ejecución del referido programa, petición que se consideró improcedente. Tras varios años de litigio, se liquidó la vinculación contractual el 8 de abril de 2013.
De esta forma, el consistorio asumió la gestión directa del desarrollo de la 55-UE-R, sin poder completar la totalidad de la ejecución con el paso de los años. De ahí que en 2019 se volviera a licitar la urbanización, resultando Becsa la ganadora del concurso público. La compañía se impuso a otras cinco concurrentes en un proceso que culminó el 4 de noviembre con la adjudicación. No obstante, hasta el pasado 10 de febrero de 2021 no se formalizó el contrato.