CASTELLÓ. La compañía castellonense Becsa sigue ampliando su negocio en uno de los ámbitos en que mayor presencia tiene: la conservación de carreteras. En esta ocasión, la filial del grupo Simetría se ha hecho con el contrato para conservar las carreteras que dependen del Estado en uno de los sectores en que se divide la provincia de Albacete.
El contrato conllevará unos ingresos de algo más de 6 millones de euros (IVA excluido) para la firma arraigada en la capital de la Plana por la conservación de los 225 kilómetros que suman seis tramos de la N-322 y uno de la A-32 durante los próximos tres años, según consta en el informe de adjudicación.
Fuentes de la compañía han confirmado la medida y han apuntado que están a la espera de firmar el contrato en breve. No en vano, los pliegos ya prevén que durante este año se inicien estos trabajos de mantenimiento y conservación, que se prolongarán hasta 2023.
La presentada por Becsa para el concurso abierto por la Dirección General de Carreteras dependiente del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana ha sido la mejor valorada de entre las 31 presentadas. Pero lo que ha decantado la balanza ha sido su propuesta técnica para los trabajos, que ha recibido la mayor puntuación, con casi 44 puntos.
Y es que en el apartado económico eran varias las ofertas más bajas. Entre ellas la de CHM, que fue catalogada como anormalmente baja al situarse por debajo del 60% de los 10,48 millones de euros de presupuesto base de licitación. Otras varias propuestas mejoraban la oferta económica de la firma castellonense, que finalmente se ha llevado el gato al agua por sus mejoras técnicas.
Con todo ello, Becsa continúa ampliando su ámbito de actuación en el mantenimiento y conservación de carreteras por la geografía estatal, donde recientemente se hizo con otro contrato en Valladolid.
