CASTELLÓ. Benicàssim ya ha iniciado las obras de la segunda fase de la prolongación de la CV-149 por la avenida Ferrocarril. La firma del acta de replanteo ha marcado ese inicio y coincidiendo con ello, el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Benicàssim ha mantenido un encuentro con los vecinos de la zona.
La primera edil, junto al concejal de Urbanismo y Movilidad, Carlos Díaz, explicaron a los asistentes al encuentro que tuvo lugar en la Escuela Infantil Municipal Pintor Tasio los pormenores de esta segunda fase cuyo plazo de ejecución se ha fijado en dos meses y consiste en la construcción de un vial de conexión entre la calle Pierre Merchain y la rotonda de la avenida Mohíno para dar continuidad a la prolongación de la CV-149.
“Este proyecto es fundamental para mejorar la movilidad de la zona, conectándola con la primera fase y ampliando los kilómetros de carril bici para esa movilidad alternativa. El objetivo es concluir una infraestructura que mejore la movilidad, que descongestione las actuales vías sobre todo en verano y que vertebre directamente conectando de norte a sur la ciudad”, ha comentado la alcaldesa, Susana Marqués, quien ha recordado que esta segunda fase ha contado con un presupuesto de 290.000 euros, “una inversión que se aprobó en el pleno ordinario del pasado mes de marzo y, a pesar de contar con los votos en contra del PSPV-PSOE, Compromís y Ara Benicàssim hoy es una realidad”.
Carlos Díaz comentó a los asistentes que la actuación contempla dos carriles de tres metros de ancho cada uno, un nuevo trazado del carril bici y la creación de una nueva rotonda para evitar los giros a izquierdas, “facilitando la movilidad y controlando la velocidad”. El proyecto a ejecutar en una longitud de 450 metros, también contempla la creación de una nueva zona peatonal entre la calle Mare de Déu del Lledó hasta la calle Santa Elena, “además de la instalación de farolas con lo que reforzaremos la iluminación y la seguridad en la zona”, ha añadido Díaz.
Recordar que la primera fase de prolongación de la CV-149, con una extensión de 620 metros, cuatro carriles (dos por sentido) y un carril bici, se abrió al tráfico a finales de octubre del 2021 y fue una de las inversiones que se acordaron como prioritarias por todos los grupos políticos de la corporación municipal, en atención a las demandas planteadas por los ciudadanos. Asimismo, las obras destacaron por su apuesta por la sostenibilidad ya que permitió a Benicàssim ampliar su huella verde al reducir 297 toneladas de CO2; dato que se extrajo del estudio realizado por la empresa adjudicataria en cuanto a la disminución de la huella de carbono, comparando las emisiones producidas entre la solución que ejecutó el Ayuntamiento, mediante la reutilización de áridos existentes, y los métodos tradicionales. Esta acción es un paso más en la estrategia para alcanzar los objetivos a los que se comprometió el consistorio al adherirse a la Red de Entidades Locales para la Agenda 2030 y en el cumplimiento de Objetivos de Desarrollo Sostenible.