BURRIANA. Más de 147.000 euros es el coste fiscal estimado de las exenciones y bonificaciones en este primer período de 2023 de los padrones fiscales de tributos municipales, concretamente de la tasa de gestión de residuos, en concepto de beneficiarios de prestaciones por suministros básicos energéticos y por bonificaciones a jubilados y pensionistas, del impuesto sobre vehículos por 8 conceptos distintos y por las domiciliaciones tributarias.
Según ha explicado la concejala de Hacienda, Cristina Rius, en la tasa por gestión de residuos se aplican este año 118 exenciones a las personas que, durante el pasado año 2022, fueron beneficiarias de prestaciones económicas individuales de emergencia social en concepto de pobreza energética, con un coste fiscal estimado de 12.862 euros.
Esta exención se introdujo en 2017 por primera vez en la ordenanza fiscal, siguiendo criterios de capacidad económica para ayudar a las personas más desfavorecidas. Al respecto, Rius ha destacado el incremento de beneficiarios, en la misma tasa, que ostentan la condición de jubilados o pensionistas. "Este año se duplica el importe y número de beneficiarios habitual que en ejercicios anteriores y serán 159 las personas que se acogerán a la reducción del 50% de la tasa, con un coste fiscal de 8.665,50 euros", ha señalado.
Dentro del padrón del Impuesto de vehículos 2023, también se aplican bonificaciones a un total de 1.168 vehículos con un coste fiscal de 94.263 euros. Entre ellas, Rius ha destacado los nuevos beneficios fiscales para incentivar la compra de vehículos ecológicos, aprobados por este equipo de gobierno al inicio de la pasada legislatura, que se han ido incrementando progresivamente, siendo actualmente un total de 125 los vehículos híbridos y eléctricos que se reducen un 50% y 75% la cuota, respectivamente.
A este impuesto se le aplicarán exenciones por otros seis conceptos, destacando el de discapacidad, del conductor o de la persona transportada, con un total de 512 beneficiarios, o los 272 vehículos antiguos con que cuenta el parque móvil de Burriana.
El decreto de alcaldía de la aprobación de los padrones del primer período incluye, además, la aprobación del plazo y la forma en que se procederá al cobro de los recibos. Así, el período voluntario comienza el próximo 15 de marzo y se prolongará hasta el 5 de junio. Durante poco más de dos meses y medio se podrán abonar las tasas urbanas de gestión de residuos y vados y el Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM) en cualquiera de las oficinas de las entidades colaboradoras: Caja Rural San José, CaixaBank, Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA) y Banco Sabadell, presentando el documento de pago expedido por el Ayuntamiento de Burriana, que será remitido al domicilio de la persona contribuyente, sin que el envío suponga notificación de la liquidación, o podrá ser recogido en el Servicio Municipal de Recaudación, ubicado en la planta baja del Ayuntamiento.
Para los recibos domiciliados, dentro del período indicado, el Ayuntamiento efectuará dos cargos del 50% de la cuota, uno el 28 de marzo y el segundo el 29 de mayo, con una bonificación del 1% de la cuota líquida, hasta un máximo de 10 euros.
En este sentido, Rius ha hecho hincapié en el incremento progresivo del importe anual de las cuotas domiciliadas en entidades bancarias, que supuso el pasado ejercicio un coste fiscal para las arcas municipales de 92.000 euros, abarcando más de un 70% de los padrones municipales.
Sobre esta rebaja fiscal, la regidora ha asegurado que "llega cada día a más contribuyentes destacando las domiciliaciones de la tasa de gestión de residuos, un 10% más que en 2017, seguidas por el Impuesto de Bienes Inmuebles que alcanzó el 76% en rústica y el 66% en domiciliados de urbana".
La edila de Hacienda ha recordado que el año 2023 ha comenzado con una congelación total de las tasas e impuestos para los vecinos y vecinas y para las empresas de Borriana.
Un año más, el gobierno municipal ha optado por "no aumentar la carga impositiva a la ciudadanía" como medida de "protección a las personas frente a los incrementos de los costes energéticos, incremento del euríbor que se aplica a las cuotas de las hipotecas, al incremento de precios en general motivado por la crisis derivada de la guerra de Rusia contra Ucrania", según ha asegurado la alcaldesa, Maria Josep Safont.
Además, el gobierno local mantiene todos los beneficios fiscales aprobados hasta ahora, añadiendo algunos nuevos y mejorando las condiciones de renta máxima para facilitar el acceso a las bonificaciones existentes que se rigen por el IPREM, como es el caso de las familias numerosas y de las personas jubiladas y pensionistas.