CASTELLÓ. La portavoz del PP en el Ayuntamiento de Castelló, Begoña Carrasco, ha declarado este jueves que "el hormigón es el único protagonista de la reforma de la avenida Lidón que está imponiendo Amparo Marco. Un simple recorrido por el tramo de la avenida Lidón más próximo a la Basílica de la patrona confirma los peores presagios: ni es más verde, ni más accesible ni reduce el CO2 ni mejora la calidad de vida. La reforma de la avenida Lidón confirma lo que ya decían los vecinos, que era absolutamente innecesaria, un derroche de dinero que en nada mejorará la calidad de vida de los castellonenses con respecto a lo que ya había".
"Son 3,3 millones de euros que podrían haber servido para solucionar los problemas que hay en otros muchos puntos de la ciudad, donde sí esperan inversiones los vecinos, en lugar de para enterrarlos en un proyecto que nadie ha pedido", ha añadido.
Carrasco ha recorrido el eje, que se encuentra ahora mismo en obras, a petición de los vecinos de Rafalafena y de la Marjaleria, representados por Vicky Amores y Jorge Begues, para conocer de primera mano el desarrollo de los trabajos, las consecuencias que está teniendo para la movilidad de vehículos y personas y seguir escuchando a los residentes y emprendedores que viven en la avenida o en las inmediaciones del eje. “El clamor en contra es prácticamente unánime”, ha destacado.
"Las obras de la avenida están haciendo ya del gran eje que era una barrera que va a partir en dos la ciudad. Los efectos sobre la movilidad de los vehículos es totalmente evidente, puesto que a día de hoy ya solo se puede cruzar transversalmente en dos puntos: a la altura del Tombatossals y en la rotonda que hay sobre la Ronda de Circunvalación, y aun así, en ambos casos, se ha reducido el ancho de los carriles, de manera que será sí o sí un cuello de botella, a lo que se añade la necesidad de que los trayectos sean más largos para llegar al mismo punto, generando más emisiones de CO2 obligatoriamente", ha reseñado.
Asimismo, la portavoz del PP en el Ayuntamiento de Castelló resalta que, "en contra de lo prometido, no hay ni un solo árbol más. De hecho, se ha eliminado espacio para plantas, puesto que se ha suprimido uno de los parterres de flores que adornaban la avenida. El tramo frente a la Basílica y la explanada es ahora una inmensa masa de hormigón, que lo ha pintado todo de negro y gris, borrando la imagen verde de uno de los rincones más bonitos de la ciudad para pasear".
Por otro lado, también ha lamentado que "el equipo de gobierno de Amparo Marco haya engañado a los castellonenses, puesto que prometió que se utilizaría cerámica en la reforma, pero se siguen colocando bloques de hormigón procedentes de una empresa de materiales de La Roda (Albacete). No tenemos nada en contra de ningún fabricante, pero creemos que un proyecto así debería haber apostado por el producto estrella de nuestra tierra, la cerámica, y más en un momento como el actual, cuando tan mal lo están pasando las empresas por el brutal aumento de los costes energéticos. La falta de sensibilidad y empatía con el entorno socioeconómico de Castelló y sus vecinos de la alcaldesa nos parece muy preocupante", ha remarcado.