"Caso insólito": la importación supera a la exportación en agosto debido a la compra de crudo

CASTELLÓN. "La balanza comercial provincial registró, caso insólito, un déficit de 13,78 millones de euros". Este es un extracto del último informe de comercio exterior de la Dirección provincial, el que se refiere al mes de agosto. Y es que no es nada habitual (las estadísticas podrían remontarse muchos años) encontrar un mes en que la llegada de productos del extranjero supere al envío de bienes castellonenses. De hecho, acto seguido al anterior apunte, el mismo informe recoge cómo "hace un año existía un superávit de 200,35 millones" en este saldo comercial.

Y lo más sorprendente de todo es que este saldo negativo (que no lo es para la economía, sino en este balance contable) se produce a pesar de que las ventas castellonenses en el extranjero aumentaron un 13,5% en relación a un año antes. Concretamente, en el octavo mes de este 2018 Castellón vendió productos fuera de España por valor de 525 millones de euros. 

Así pues, la razón se encuentra en un espectacular crecimiento de las importaciones, que se han duplicado respecto a un año antes hasta los 538,8 millones de euros. Concretamente, destacan las llegadas de combustibles, que han aumentado en un 508% al pasar de los 60,7 millones de euros de agosto del 2017 a los 308 de este año. ¿Qué quiere decir esto? El mismo informe de Comercio Exterior lo explica cuando habla del aumento de la importación en los últimos doce meses: "Los precios del crudo de petróleo continúan en franca recuperación. El petróleo significa el 44,33% de las importaciones. Esta importancia del crudo hace que cualquier cambio en la política de compras, en la actividad de la refinería o las variaciones en el precio del crudo, como es el caso, tengan una gran incidencia en los datos de la importación provincial". Es decir, el aumento de la llegada de crudo para el aprovisionamiento de la refinería de BP Oil en el polígono del Serrallo, unido al incremento de su precio, han disparado el valor de las importaciones. 

Pero no solo la refinería ha aumentado sus compras. También la planta de biodiésel del puerto, operada por Masol Iberia, ha incrementado su aprovisionamiento, como lo demuestra el crecimiento, de un 40%, del apartado Grasas, aceites animales y vegetales, clave para esta factoría y del que también se nutre la refinería. De esta manera, la actividad de ambas instalaciones tiene buenas perspectivas para los próximos meses.