CASTELLÓ. (EFE). El Ayuntamiento de Castelló trabaja ya en desarrollar y enviar a la Comisión Europea su nuevo Plan de Acción por el Clima y la Energía que permita su adhesión al Pacto de Alcaldías por el Clima y la Energía 2030, un pacto europeo mediante el cual las entidades locales adquieren el compromiso de reducir un 40 % de sus emisiones de CO₂ respecto al año 2010. Según han informado fuentes municipales, la Concejalía de Transición Ecológica ha reiterado su intención de aumentar los objetivos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero coincidiendo con la fecha del 28 de enero, Día Mundial Contra las Emisiones de CO₂.
El concejal de Transición Ecológica, Fernando Navarro, ha asegurado que "la lucha contra el cambio climático es el gran reto social del Siglo XXI y las ciudades tienen que jugar un papel clave". El edil ha señalado que "esta década será vital para determinar si somos capaces de minimizar y paliar los efectos catastróficos derivados del aumento de la temperatura del planeta y precisamente la movilización de recursos públicos para la recuperación económica post-covid se tiene que alinear con inteligencia en este reto, y desde las instituciones hemos de asumir la política climática no como sectorial sino como la brújula de todas las políticas públicas".
Por eso, a su juicio, es importante que "tracemos una hoja de ruta transversal en toda la ciudad que nos marque el camino para avanzar hacia un modelo sostenible a largo plazo". Castelló se adhirió en 2009 al primer Pacto de Alcaldes por el Clima y la Energía 2020 y este año ya se han iniciado los trabajos para elaborar un plan de acción de la ciudad que se presentará en el programa de la Comisión Europa. Este Plan contemplará medidas vinculadas a la eficiencia energética, la rehabilitación sostenible de los edificios residenciales, la movilidad y el estímulo de sectores económicos con menos emisiones.
El inventario del ciclo 2008-2018 con el que el Ayuntamiento de Castelló cuenta actualmente indica que las medidas del primera Plan de Acción fueron insuficientes y las emisiones disminuyeron por bajo del 20 % fijado por el Pacto de Alcaldías, una estimación de un 13%, todo y la falta de los importantes datos relativos al transporte.
Las actuaciones sobre las emisiones derivadas del sector público cumplieron los objetivos, pero solo originan el 3 % de las emisiones total de la ciudad. Castelló suspendió en eficiencia energética en el parque residencial, en las emisiones industriales y en las emisiones del transporte, responsables en conjunto del 97% de emisiones. Además Castelló también trabaja ya en el proyecto de Cálculos de Huellas de CO₂ y de absorción municipal impulsado por la Red de Ciudades por el Clima y la Energía con el cual, mediante el asesoramiento del Ministerio para la Transición Ecológica, diferentes ciudades se implicarán al avanzar hacia la neutralidad climática.