CASTELLÓ. Castellón tiene, actualmente, más de 250.000 personas ocupadas. Hacía más de trece años, concretamente desde el primer trimestre del año 2009, que la provincia no lograba superar esta barrera psicológica.
Esta es, a trazo grueso, quizás la principal conclusión que se puede extraer de las cifras de la Encuesta de Población Activa del segundo trimestre de este año que el Instituto Nacional de Estadística ha hecho públicas este jueves. Según este informe, al cierre de junio, la cifra de personas que declaraban trabajar de forma activa en la provincia eran 250.100. Estas son cas mil quinientas más que las cifras oficiales de la Seguridad Social, que contaba con 248.760 cotizantes 30 de junio. Así, aunque en los últimos meses la Seguridad Social ha informado en algún dato puntual de rebasar esos 250.000 cotizantes, la EPA no lo había hecho desde aquel primer trimestre de 2009 (y los anteriores, cuando la cifra todavía era mayor)
Es habitual que el segundo trimestre sume trabajadores sobre el primero, por lo común el más flojo en cuanto a empleo en las comarcas castellonenses. Pero no lo es tanto el volumen con que lo ha hecho: ni más ni menos que 12.200 personas encontraron trabajo desde el inicio de marzo hasta el final de junio en el territorio provincial. Y el incremento respecto al segundo trimestre del año anterior todavía es mayor: 13.000 empleados más.
A este aumento de personas ocupadas en la provincia ayudaron todos los sectores económicos... excepto la industria. Según los datos de la EPA, en los últimos tres meses en el sector secundario dejaron de trabajar casi diez mil personas, al pasar de 56.300 ocupados a 46.600. Esta es una caída brutal que solo se podría explicar en el caso de que tal cantidad de personas se hubiera visto afectada por una suspensión de empleo en virtud de un ERTE. Pero según la metodología del INE, los incluidos en expedientes de regulación temporal de empleo deben ser contabilizados como ocupados si hay garantía de su reincorporación a su puesto de trabajo, como es preceptivo con un ERTE. Así, el motivo de la caída de ocupados en la industria no está nada claro.
En la vertiente contraria, los servicios, con casi 19.000 ocupados más (pasaron de 158.100 a 177.000) fueron la principal aportación al incremento, algo lógico a las puertas del verano. Pero también la agricultura, que sumó 2.200 trabajadores hasta alcanzar los 11.000 y la construcción, con 900 más hasta los 15.500, también sumaron personas a la lista de empleados.
Se da además una circunstancia curiosa. Y es que, según el INE, toda la población activa del sector primario castellonense se encuentra actualmente ejerciendo un empleo. En ambos casos la cifra es de 11.000 personas. En el resto de sectores, la diferencia no es demasiado abultada: 3.100 en industria, cuya población activa también cae hasta las 49.700 personas; 700 en construcción, con 16.200 activos; y 9.000 en servicios, que con 188.000 integrantes entre su población activa sí registra una diferencia mayor.
En conjunto, se trata de buenas cifras las que la EPA aporta para la provincia de Castellón... que en teoría deberían seguir mejorando a lo largo del trimestre estival, tradicionalmente el mejor en cuanto a empleo.
