CASTELLÓ. Todas las ramas económicas de la provincia de Castellón perdieron trabajadores en el segundo trimestre del año si se compara con el anterior. La Encuesta de Población Activa, que ha hecho pública este viernes el Instituto Nacional de Estadística, apunta que a la conclusión de junio en las comarcas castellonenses había 232.800 personas ocupadas, lo que supone 8.600 menos que a finales de marzo.
La caída de ocupados en este segundo trimestre se produjo en todos los sectores, siendo especialmente significativo el descenso en servicios (con 3.600 trabajadores menos) e industria (-2.600). Menos acusada fue en agricultura (1.500 empleados menos) y la construcción (-1.000). Eso sí, la estadística del INE no tiene en cuenta a las personas incluidas en los expedientes de regulación temporal de empleo, que a finales de marzo se dispararon debido a la declaración del estado de alarma y que a la conclusión de junio habían recuperado a buena parte del personal afectado.
De esta manera, la caída de la ocupación se explica en buena parte, sin duda, por la influencia del coronavirus, pero también por otras causas. Y es que por ejemplo la agricultura ha sido un sector prioritario de la actividad económica durante la pandemia, pero la finalización de la campaña citrícola antes que la pasada y el hecho de que parte de sus ventas, destinadas al sector Horeca, no estén funcionando como debería, le ha llevado a perder peso laboral.
Con ello, agricultura es el sector que más masa proletaria había perdido a finales de junio respecto al año anterior. Ni más ni menos que 4.700 ocupados. Y es que las cifras, comparadas con las de 2019, muestran paradojas muy acusadas.
Así, por ejemplo, en conjunto Castellón contaba a la conclusión de junio con 400 personas ocupadas más que un año antes. Y el funcionamiento por sectores es muy diferente. Toda la pérdida de masa laboral la asume agricultura, mientras la construcción repite la cifra (los 15.800 trabajadores son solo cien menos que en junio de 2019) e industria y servicios suman personal en el ejercicio de su profesión.
En concreto, el sector secundario suma 1.500 trabajadores, hasta alcanzar los 54.300 actuales; y el terciario dispara sus cifras de empleo en 3.800 personas hasta las 154.200.
Se trata, de esta manera, de un comportamiento muy variable el que refleja la EPA en la provincia de Castellón, algo que ha sucedido ya en diferentes ocasiones. De hecho, en el primer y segundo trimestre de 2019 y el segundo de este año las cifras del INE se mueven en torno a los 233.000 ocupados en las comarcas castellonenses, mientras en el primer trimestre de este año la cifra se disparó hasta los 241.400.