CASTELLÓ. El Ayuntamiento de Castelló, a través de la concejalía de Salud Pública, continúa desarrollando las labores de control y tratamiento para evitar la proliferación de mosquitos, especialmente de cara a las lluvias previstas en los próximos meses de otoño.
Las actuaciones se están concentrando en zonas sensibles como la Marjalería, el Grau y los imbornales de toda la ciudad. Cabe recordar que a principios de este mes ya se intensificó la intervención en los entornos escolares, con el objetivo de proteger la salud de los más pequeños y garantizar espacios seguros al inicio del curso.
El consistorio también está respondiendo con rapidez a los avisos vecinales que llegan a través de los canales oficiales. En este sentido, el concejal de Salud Pública, Luciano Ferrer, ha señalado que "esta comunicación directa con la ciudadanía permite actuar con mayor agilidad en la detección de nuevos focos, garantizando así una respuesta inmediata y eficaz en todos los distritos del municipio".
Ferrer ha recordado que, aunque el Ayuntamiento trabaja de manera constante en las zonas públicas, la colaboración vecinal resulta fundamental: "Nosotros no vamos a bajar la guardia, pero los vecinos también deben tomar medidas en sus espacios privados. La colaboración ciudadana es esencial. Lo más importante es revisar patios, jardines o recipientes donde se pueda acumular agua, y en caso de detectar focos, comunicarlos al correo".
Recomendaciones a la ciudadanía
El área de Salud Pública recuerda a los vecinos la importancia de adoptar medidas preventivas en sus viviendas y propiedades privadas para evitar la proliferación de mosquitos. Una de las principales recomendaciones es lavar piscinas, tanques y albercas que almacenen agua, así como mantener niveles adecuados de cloro en las piscinas para impedir que se conviertan en focos de cría.
También se aconseja evitar la acumulación de agua en macetas tras las lluvias y renovar cada dos o tres días los bebederos de los animales, ya que son puntos donde los mosquitos pueden reproducirse con facilidad.
De igual modo, se recomienda verter agua en los sumideros al menos una vez por semana, proteger pozos, bidones y aljibes con mosquiteras, y revisar de forma periódica los sistemas de riego por goteo para garantizar que no generen encharcamientos.
El concejal ha destacado que "la estrategia municipal de control de plagas no se limita a actuaciones puntuales ni a épocas concretas, sino que forma parte de un programa de prevención activa que se mantiene durante todo el año. El control de mosquitos exige constancia, planificación y recursos. Y eso es exactamente lo que está haciendo este equipo de gobierno. La salud de nuestros vecinos es una prioridad y en esas vamos a seguir".