CASTELLÓ. El Grupo Municipal de Compromís per Castelló ha criticado el presupuesto municipal elaborado por PP y Vox para 2026, señalando que el documento “vuelve a evidenciar el engaño permanente de la señora Carrasco” y que “no responde a lo que necesita la ciudad ni cumple la palabra que ella misma había dado”. La coalición considera que el gobierno anuncia inversiones como si fueran méritos propios, cuando una parte del mismo ejecutivo votó en contra de los fondos europeos que ahora presenta como bandera.

El portavoz Ignasi Garcia ha subrayado que “con estos presupuestos que nos presenta la señora Carrasco, vuelve a incumplir su palabra, no son unos presupuestos ambiciosos ni transformadores, tal como necesita la ciudad de Castellón”, y ha recordado que “de lo que más presume el gobierno es de unas inversiones europeas a las que la mitad del gobierno de Carrasco votó en contra; es la demostración de que lo único que une al PP y a Vox es el sueldo que cobran del Ayuntamiento, esos más de 60.000 euros y poco más”. La coalición remarca que estos fondos europeos han llegado a Castellón con el apoyo de los grupos progresistas, que los votaron a favor “por responsabilidad”.

"Caída de inversiones y falta de ambición"

Asimismo, Garcia ha subrayado que “de poco sirve tener el presupuesto más grande de la historia si damos la espalda a quien más lo necesita, si no tenemos recursos para reformar escuelas ni para preparar Castellón frente a la crisis climática”. Compromís asegura que el gobierno municipal “ha dejado perder Edificant”, ya que Castellón pasa de 5 millones de euros para reformar escuelas a solo 20.000 euros en 2026, una cifra que evidencia la falta de trabajo y de reivindicación ante la Generalitat.

La coalición también ha alertado de que el presupuesto incluye una previsión de ingresos que no se ajusta a la realidad, especialmente en lo que respecta a la tasa de basura. Según explican, el gobierno presupuestó una recaudación superior sabiendo que deberá aplicar bonificaciones que reducirán los ingresos reales. Compromís considera que esta situación evidencia “falta de rigor” en la gestión económica y alerta de que el gobierno “pinta unas cifras que no se corresponderán con lo que finalmente entrará en las arcas municipales”.

Un presupuesto "fuera de tiempo y con riesgo financiero"

Garcia ha advertido de que la situación es “especialmente grave” porque las conclusiones del informe de Intervención alertan de que el ahorro neto del consistorio es “muy ajustado” y apenas alcanza un millón de euros, recomendando aumentar ingresos o reducir gasto para no comprometer la capacidad financiera futura. Además, el informe constata que no se han cumplido los plazos legales que la misma alcaldesa se había fijado para la remisión del presupuesto al Pleno ni para garantizar su entrada en vigor el 1 de enero. “Carrasco había prometido que el presupuesto estaría aprobado a tiempo y lo que tenemos es un incumplimiento total: ni ha llegado cuando tocaba ni estará en vigor cuando ella misma anunció”, destaca el portavoz.

La formación lamenta, asimismo, que la alcaldesa vulnere la participación ciudadana convocando comisiones de urgencia antes de que finalice el plazo de alegaciones a las ordenanzas fiscales. Esta maniobra se produce mientras el Ayuntamiento ya tiene preparada la prórroga presupuestaria y, según alerta Garcia, responde únicamente al interés de la alcaldesa por “hacerse la foto antes de las vacaciones de Navidad”. “Antes de que la ciudadanía pueda decir nada, Carrasco ya ha decidido que rechazará cualquier aportación, aunque sea positiva para la ciudad. Es un hecho que no había ocurrido nunca”, agrega.

La coalición también ha puesto el foco en el incremento continuado de la recaudación municipal, que ya se acerca a los 100 millones de euros anuales, siete millones más en solo tres años. “En un momento en que la cesta de la compra es más cara, la vivienda es más cara, la recaudación sube pero los servicios públicos no mejoran”, lamentan. Compromís concluye que este presupuesto “no piensa en grande”, sino que “piensa en pequeño y se conforma con unas ambiciones demasiado modestas para una ciudad que necesita más valentía y más trabajo”. La coalición remarca que el gobierno “se olvida de la gente más vulnerable y de preparar la ciudad frente al cambio climático”.