CASTELLÓ (EFE). El pleno del Consejo General del Poder Judicial ha nombrado a José Manuel Ortega Lorente presidente de la Audiencia Provincial de Valencia y a Sofía Díaz García, presidenta de la Audiencia Provincial de Castellón. Además, ha nombrado a Antonio López Tomás, presidente de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana. El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha conseguido nombrar a los magistrados Andrés Martínez Arrieta y Pablo Lucas presidentes de dos Salas clave del Tribunal Supremo, gracias a la renuncia de las juezas respaldadas por los progresistas, que se retiraron hace días de la pugna tras meses de bloqueo en las negociaciones.
Según informan a EFE fuentes jurídicas, los candidatos favoritos del sector conservador han logrado la mayoría suficiente de los votos para alzarse con las presidencias de la Sala de lo Penal (Martínez Arrieta) y de lo Contencioso (Lucas) en el pleno celebrado por el órgano del gobierno de los jueces este miércoles. Ambos, además del bloque que les apoyaba, han recibido el respaldo de varios vocales progresistas, que han facilitado las presidencias de los magistrados en virtud de la "lealtad institucional", la misma que -dicen en un escrito facilitado a los medios- llevó a la juezas Ana María Ferrer y Pilar Teso a renunciar la semana pasada a sus candidaturas.
Votaciones
En la votación de este miércoles, 15 vocales han votado a favor de Martínez Arrieta frente a 6 votos en contra; mientras que Pablo Lucas ha conseguido el apoyo de 16 miembros del CGPJ frente a 5 contrarios, según las fuentes. Con sus nombramientos, se pone fin a meses de negociaciones encalladas en las que los vocales progresistas han intentando que al menos una de las presidencias fuera ocupada por una mujer para garantizar el principio de presencia equilibrada de mujeres y hombres, que contempla la ley.
Pese a que algunos han apoyado a los candidatos conservadores, lamentan que siga sin conseguirse esa paridad en altos puestos de la judicatura y recuerdan: cuatro de las cinco presidencias de Sala del Supremo seguirán ocupadas por hombres.