VALL D'UIXÓ (EP). El Ayuntamiento de la Vall d'Uixó ha solicitado la declaración de zona catastrófica por los daños causados por la granizada del pasado fin de semana. En concreto, en el término municipal se han visto afectadas 1.200 hectáreas -ubicadas en las zonas limítrofes con Nules y la Vilavella- y las pérdidas económicas se estiman en 4 millones de euros, según la valoración que se ha hecho en contacto con las cooperativas y los sindicatos agrarios, según ha informado el consistorio en un comunicado.
La comarca de la Plana Baixa ha sido especialmente afectada por esta dana del 12 de julio, un fenómeno meteorológico que "cada vez es más recurrente y violento por el cambio climático", tal y como ha explicado el concejal de Agricultura y Medio Ambiente, Marc Seguer. Además el sector agrícola "vive siempre a expensas del tiempo", ha añadido.
Así, además de solicitar la declaración de zona catastrófica al Gobierno de España para que el sector "reciba ayudas, medidas compensatorias y cobertura de los seguros", el concejal también ha pedido públicamente a la Generalitat Valenciana, competente en agricultura, que "complemente las ayudas para cubrir lo que los seguros no cubren o reparta productos necesarios como los cicatrizantes".
Esta solicitud se ha conocido durante la visita al proyecto de terrenos de gestión compartida que la Cooperativa Vallfrut impulsa con fondos europeos, una colaboración público-privada que "apuesta por recuperar terrenos abandonados desde la innovación y la sostenibilidad", tal y como ha destacado la alcaldesa, Tania Baños, que ha conocido esta iniciativa junto a la subdelegada del Gobierno, Antonia García, al presidente de Vallfrut, Manuel Beltrán, y al concejal de Agricultura, Marc Seguer.
Esta iniciativa responde al abandono progresivo de parcelas agrícolas por falta de rentabilidad o de relevo generacional. Este año se han puesto en producción 94 hectáreas, de manera que se aumenta la capacidad de producción de la cooperativa, que se encarga de la gestión integral de las fincas que los socios ceden. A través de este sistema se evita el abandono de campos de cultivo, por lo que es "un ejemplo a seguir en otros municipios, porque protege el futuro agrícola del territorio", ha apuntado el edil.
