CASTELLÓ. Una de las principales prioridades del ejecutivo municipal de Nules para el presente mandato es generar nuevo suelo industrial que permita ampliar el tejido empresarial radicado en la localidad. Para lograrlo, el departamento municipal de Urbanismo trata de resolver la tramitación de cinco ambiciosos proyectos en la cara sur del término, con la antigua N-340 como eje vertebrador de todos ellos.
Uno de los más trascendentales es el PAI Sector 6 La Rambleta, que encalló en diciembre de 2022 cuando el consistorio lo desprogramó y retiró la condición de agente urbanizador a la desaparecida empresa Cerfrit. Por suerte para los intereses municipales, la entrada en escena del potente grupo cerámico Sicer con la compra de la antigua planta productiva de Cerfrit cambió el escenario y reactivó el viejo objetivo de urbanizar el extremo norte del Polígono Industrial La Mina. “El proyecto de urbanización de ese PAI está definido, solo falta actualizarlo y volver a programarlo. Si nadie lo hace, lo ejecutará el Ayuntamiento de forma directa porque Nules necesita generar suelo industrial y ese lo tenemos parado”, anuncia el concejal de Urbanismo, César Estañol.
Además de los 30.000 metros cuadrados de superficie de la antigua Cerfrit en manos de Sicer, otras compañías también han comprado terrenos en esa misma zona: el Grupo STN ya posee la antigua fábrica de Venus y Guzmán Minerals hizo lo propio con otra parcela cercana. Ambas disponen así de suelo industrial apto para expandir sus respectivas plantas productivas cuando lo estimen oportuno.
Interés de Blumaq
Algo más al norte, entre la fábrica de envases Huhtamaki Spain y el barranco Juan de Mora, está en la misma tesitura la Unidad de Ejecución Polígono 2, del Plan Parcial Polar 1. En este caso el pasado febrero, el Ayuntamiento aprobó la declaración de caducidad y retiró la condición de agente urbanizador a la extinta empresa citrícola Cipla. “El nuevo propietario de estos terrenos —la empresa Blumaq, fabricante de repuestos para maquinaria de obra pública, construcción y minería— tiene interés en urbanizarlos. Vamos a darle también un plazo prudencial para volver a programar el ámbito y, si no lo hacen, será el Ayuntamiento quien lo tramite con la fórmula de la gestión directa”, remarca Estañol.
El consistorio aprobó esta unidad de ejecución en diciembre de 2015 con un coste de urbanización de 486.767 euros. Sin embargo, Cipla no llegó a presentar los avales bancarios antes de fusionarse con la cooperativa citrícola Nulexport. La posterior liquidación de la empresa el año pasado abrió el camino para cancelar el proyecto urbanístico. Igual que sucedió con Sicer, la irrupción de Blumaq abre ahora una nueva vía para desarrollar estos terrenos industriales.

- Un segundo solar industrial en venta en Nules
Justo a continuación, en el lado sur de Huhtamaki Spain, están casi terminadas las obras de urbanización de la Unidad de Ejecución Polígono 3, del Plan Parcial Polar 1. El consistorio Nulense aprobó el pasado febrero la segunda modificación del proyecto, fundamental para dotar a los terrenos de suministro energético. El documento técnico incluye los condicionantes que puso Nedgia Cegas y ADIF respecto a las obras eléctricas y al trazado ferroviario. “Mantenemos el objetivo de recepcionar esas obras en breve para abrir al tráfico todas las nuevas calles ya ejecutadas”, insiste el edil de Urbanismo.
Dos años sin informe
La cuarta gran bolsa de suelo industrial por desarrollar corresponde al Plan de Reforma Interior (PRI) del Ámbito Sureste. En este caso, ya han transcurrido más de dos años sin que la Dirección General de Carreteras del Ministerio de Fomento haya redactado el preceptivo informe favorable a la creación de un nuevo enlace al Polígono Industrial La Mina junto a la rotonda que conecta la N-340 y la N-225. El carril de deceleración proyectado es requisito imprescindible para ejecutar ese nuevo acceso sur.
Desde hace más de una década, el Grupo Keraben, Grespania y Sibelco Minerales persiguen con ese PRI regularizar sus instalaciones y poder ampliarlas. El Ayuntamiento culminó en diciembre de 2022 el proceso de expropiación al resolver los recursos de reposición que habían presentado 3 de los 25 propietarios contrarios al PRI por la baja valoración económica de sus terrenos. “La tramitación de este proyecto lleva más de dos años colgada a la espera del informe de Carreteras que autorice el carril de deceleración”, lamenta el edil de Urbanismo.
El último proyecto urbanístico para crear nuevo suelo industrial que también sigue en compás de espera es el que corresponde a la Unidad de Ejecución Área Hortofrutícola. El Ayuntamiento aprobó en marzo de 2023 la modificación del proyecto de urbanización para reparar el tramo del vial de la calle Travesía Cabeçol que cruza con el Camí de la Mar. La fuerte granizada que cayó en Nules en abril de 2021 abombó el asfalto en ese punto justo cuando casi habían acabado las obras de urbanización de la UE.
Reparación de daños
La Agrupación de Interés Urbanístico (AIU) que impulsa el proyecto pretende ahora reparar esos daños para completar las obras. De paso, suprimirá la válvula que cerraba la conexión del saneamiento de esa área de la unidad de ejecución con la red general del alcantarillado municipal. La AIU renunciará a percibir el exceso de las cargas urbanísticas, por encima del 20% del coste. Estañol admite que el problema de la falta de las conexiones eléctricas tardará aún en resolverse, “por lo que nos tocará tener paciencia para lograr que las obras se recepcionen en su conjunto”.
Además de tratar de agilizar los tediosos trámites de estos cinco proyectos urbanísticos, el consistorio ha intentado también poner en el mercado suelo nuevo industrial mediante una sexta vía más cortoplacista: la venta de parcelas que tiene en propiedad.
Es lo que hizo el pasado mes de septiembre, cuando subastó por 904.829 euros un solar industrial de 8.447 metros cuadrados obtenido con la reparcelación de los sectores 5a y 5b. El consistorio tasó en 107 euros por metro cuadrado la parcela, situada en el número 4 de la calle del Gres, muy cerca de la fábrica de Huhtamaki Spain. “Existía el interés firme de una empresa en comprar esa parcela, por eso la sacamos a subasta, pero al final no dio el paso y de momento no hemos podido venderla”, lamenta Estañol