VILA-REAL. Todos los grupos municipales del Ayuntamiento de Vila-real y el concejal no adscrito han consensuado la concesión de las Medallas de Oro de la ciudad a cinco entidades y empresas que han contribuido de manera decidida al desarrollo económico, social y tecnológico del municipio, así como la Medalla de Honor a uno de los emprendedores más destacados del sector cerámico. Con este reconocimiento, Vila-real pone en valor trayectorias ejemplares que representan la capacidad de innovación, el arraigo al territorio, el espíritu emprendedor y la vocación de servicio que definen el carácter de la ciudad.
Una de estas distinciones ha sido para la empresa Sucesores de Santiago Manzanet, una de las primeras sociedades mercantiles de la historia de Vila-real, con una larga tradición familiar vinculada al desarrollo de la electricidad en el municipio. Con varias generaciones de electricistas que ya trabajaban en la primera central de llum de Tol, la familia Manzanet fue clave en la modernización del sistema eléctrico local y, especialmente, en la electrificación de los pozos de riego, una acción fundamental para la transformación agraria de Vila-real. Esta pequeña empresa familiar continúa hoy activa y fiel a su espíritu de servicio y compromiso con la ciudad.
También ha sido reconocida la empresa Vidres, que este año cumple cincuenta años. Especializada en el sector de las fritas y esmaltes, se trata de una de las empresas pioneras en este campo, esencial para el desarrollo del clúster cerámico de la Plana. Con una apuesta decidida por la innovación, la exportación y la diversificación, Vidres ha sabido adaptarse a los nuevos tiempos, manteniéndose como una referencia internacional. Fundada por José María Gozalbo, uno de los grandes impulsores industriales de Vila-real y protagonista destacado de su transformación económica, la empresa representa también el legado de un liderazgo visionario y de un equipo humano comprometido con la excelencia.
El reconocimiento institucional también ha llegado al Hospital Universitario de la Plana, que celebra este año su 25º aniversario. Desde su inauguración, se ha convertido en un pilar fundamental para el progreso de Vila-real como ciudad de servicios, motor de bienestar y referente en el ámbito sanitario y docente. Su extraordinario equipo humano ha hecho posible la evolución hacia una sanidad innovadora y cercana, con espacios tan simbólicos como la Casa de Partos, y una apuesta continua por la investigación, la formación y la humanización de la atención médica. El Hospital de la Plana es mucho más que un centro asistencial: es una institución fundamental para el desarrollo del territorio.
Igualmente, el Ayuntamiento ha querido distinguir a la empresa Grúas Tomás, ejemplo paradigmático de superación, capacidad de adaptación y apuesta por la formación y la innovación. Nacida del esfuerzo de una familia trabajadora, Grúas Tomás ha sabido diversificar su actividad y reinventarse a lo largo del tiempo, manteniendo siempre su arraigo a Vila-real y su compromiso con el entorno. Con figuras clave como Carmen Tomás, la empresa simboliza el impulso de las mujeres emprendedoras y de un equipo humano que ha hecho posible el crecimiento de un proyecto que continúa mirando al futuro con determinación.
Finalmente, también ha sido reconocido el diario Mediterráneo, que este año celebra su centenario. Con 100 años de historia, este medio de comunicación ha sido testigo y altavoz de la vida política, social, económica y cultural de la provincia de Castellón, y muy especialmente de Vila-real. La presencia constante de su equipo humano ha permitido transmitir el papel de la ciudad en el conjunto de la demarcación, contribuyendo a consolidar su identidad como motor de progreso. Mediterráneo representa la memoria periodística colectiva de un siglo y el valor del periodismo comprometido con el territorio.
Por otra parte, también se ha consensuado conceder la Medalla de Honor de Vila-real a José Vicente Tomás, empresario local nacido y residente en la ciudad, que ha protagonizado una trayectoria profesional de gran impacto en el mundo de la cerámica y las tecnologías de impresión digital. Fundador de diversas iniciativas industriales vinculadas a la impresión inkjet, ha contribuido de manera decisiva a la transformación tecnológica del sector cerámico, y actualmente lidera proyectos de investigación en ámbitos como los hornos eléctricos y otras tecnologías industriales emergentes. Su espíritu emprendedor, su capacidad de innovación y su arraigo a Vila-real lo convierten en un digno merecedor de esta distinción.
El alcalde José Benlloch ha manifestado que “con estas Medallas de Oro y de Honor, Vila-real rinde homenaje a personas y entidades que representan lo mejor de nuestro carácter como ciudad: el trabajo, la innovación, el arraigo y la solidaridad. Son trayectorias que explican cómo hemos llegado hasta aquí y, sobre todo, hacia dónde queremos seguir avanzando.”
“Vila-real es hoy lo que es gracias a personas como las que hoy reconocemos: gente que trabaja desde el silencio, con pasión y compromiso, para hacer avanzar la ciudad. Estas medallas son, en definitiva, un homenaje a todo un pueblo que nunca deja de crecer y de mirar hacia el futuro con esperanza”, ha añadido el máximo responsable del Ayuntamiento.
Desde el consistorio comentan que, de momento, se ha acordado por unanimidad de todos los partidos políticos en el marco de la junta de portavoces celebrada el pasado jueves y también con el apoyo del concejal no adscrito, y que ahora se tramitarán los expedientes para poder llevarlos a pleno para su aprobación y, posteriormente, acordar la fecha del acto protocolario de entrega de los reconocimientos.