VALÈNCIA. El alza del precios de la electricidad, agudizada por la invasión de Ucrania en 2022, llevó a empresas y consumidores a decantarse por la instalación de placas solares para intentar minimizar el impacto en sus facturas de la luz. Tanto es así que el autoconsumo en la Comunitat Valenciana se disparó de tal forma aquel ejercicio, que solo en los tres primeros meses de 2022 se instaló casi la mitad de potencia que en todo 2021. Además, los fondos europeos destinaron aquel año una importante partida para impulsar este tipo de instalaciones con el fin de acelerar la transición energética, lo que elevó aún más la demanda. Todo ello, generó una cascada de peticiones de ayudas, más de 48.000 solicitudes, que han acabado en un tapón administrativo contra el que lucha la Generalitat Valenciana.
En concreto, el Gobierno central sacó un programa de incentivos para la realización de instalaciones de autoconsumo con y sin almacenamiento para el sector residencial, las administraciones públicas, y el tercer sector, en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. La Comunitat Valenciana recibió cerca de 46 millones de euros, que movilizó en una línea que subvencionaba los 5 primeros MW de potencia de la instalación y hasta 50.000 euros por proyecto tanto para personas físicas, empresas como administraciones públicas.
Estas ayudas se enmarcaban dentro de los objetivos del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, y del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, establecido por el Reglamento del Parlamento Europeo, para la consecución de los objetivos fijados por el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) 2021-2030 y la Estrategia de Almacenamiento Energético. Todo ello con el fin de facilitar el despliegue e integración de las energías renovables, así como el almacenamiento para contribuir a la descarbonización.
El plazo de presentación de estas ayudas se abrió a principio de 2022 y se cerró a finales del 2023, generando un importante interés en la autonomía. De este modo, se presentaron 48.256 solicitudes, de las que, hasta ahora, solo se han resuelto 8.157, según consta en la web de la Conselleria de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio. Por tanto, todavía quedán más de 40.000 expedientes por resolver. Cada petición se evalúa por orden de presentación, según la fecha y hora de la solicitud, hasta el agotamiento de los fondos.
Así, de momento, de los 36.474.139,65 euros consignados para la generación de energía a través de sistemas de autoconsumo, se han dispuesto ya 26.679.151,99 euros, por lo que todavía quedan pendientes 9.794.987,66 euros. Por su parte, en el área de almacenamiento de este programa se presupuestaron 9.471.423,65 euros, de los que se han concedido 6.130.139,13 euros y quedan 3.341.284,52, de acuerdo con los datos de Conselleria.

- Vicente Martínez Mus, en una imagen de archivo. -
- Foto: EDUARDO MANZANA/EP
Esta situación de bloqueo ha provocado quejas ciudadanas al Síndic de Greuges, que la entidad recoge en su informe anual de 2024, presentado hace unas semanas en Les Corts Valencianes. Así, una de ellas explica la resignación de un particular que solicitó esta ayuda para el autoconsumo el 21 de octubre de 2022 a la entonces Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, pero no ha sido hasta el pasado 28 de febrero de este 2025 cuando la Administración le respondió que su expediente está todavía en proceso de tramitación.
Como justificación, la propia Conselleria admite el gran volumen de solicitudes recibidas. Por tanto, el expediente sigue en evaluación dos años y cinco meses después de su presentación, un plazo que para la entidad "se trata de una demora excesiva e inadmisible", especialmente teniendo en cuenta que el plazo legal máximo para resolver este tipo de solicitudes es de seis meses.
Refuerzo de personal en la Conselleria
Un embudo del que es consciente el departamento que dirige Vicente Martínez Mus, que asegura que está reforzando el equipo para aligerar la carga. Cierto es que el aluvión de peticiones empezó en 2022, cuando aún gobernaba el Botànic, pero el problema persiste aún en 2025, un año y cuatro meses después de que se cerrara el plazo de presentación de solicitudes y cerca de dos años después de que el PP accediera a la Generalitat Valenciana.
En cualquier caso, desde la Conselleria aseguran que para la Dirección General de Calidad y Educación Ambiental la prioridad es "acelerar la tramitación". En este sentido, señalan que mientras que de enero de 2022 a mayo de 2023 se tramitaron 5.515 expedientes, -cuando estaba en Botànic-, ya con el actual Consell del PP, es decir, de junio de 2023 a diciembre de 2024 fueron 17.600. Además, remarcan que en enero y febrero de este año "se ha incorporado personal adicional para mejorar los registros".

- Autoconsumo -
Lo cierto es que la Comunitat Valenciana es líder en autoconsumo en España. Así, según un informe elaborado por la patronal Avaesen, en 2023 la región concentraba el 13% de toda la potencia de autoconsumo de España, que era de 7.000 MW. Una dato que implica algo que más que el peso poblacional de la región, que se sitúa en el 10% del conjunto del país.
Actualmente, la autonomía sigue siendo líder junto a Cataluña y Andalucía. Las tres aglutinan cerca de la mitad de la potencia instalada en todo el territorio nacional, que a cierre de 2024 se situó en España en 8.585 MW de potencia instalada, según datos del Informe Anual del Autoconsumo Fotovoltaico de APPA Renovables. Eso sí, a nivel general, el ritmo de instalaciones y de potencia instalada no avanza como hace años. De hecho, este informe apunta que el autoconsumo registró en 2024 una contracción en su crecimiento en España, con un total de 1.431 MW instalados en el ejercicio, un 26% menos que los 1.943 MW del año anterior.