VILA-REAL (EFE). El jueves 13 de noviembre se cumplen dos años del regreso de Marcelino García Toral al Villarreal, para iniciar su segunda etapa al frente del equipo castellonense, en la que el técnico logró, primero, alejar al equipo de las zonas de descenso y, una campaña después, devolverlo a la Liga de Campeones.
Inicio complicado y permanencia asegurada
Marcelino aseguró el día de su presentación que era Marcelino y no Salvador Milagros, haciendo referencia a la complicada situación del equipo, ya que el técnico asturiano llegó a un Villarreal que bordeaba la zona de descenso y estaba en uno de sus momentos más críticos, tras una etapa de bonanza, aunque finalmente logró la permanencia con cierta solvencia.
Tras dos años de la llegada de Marcelino para suplir al destituido José Rojo Martín "Pacheta", el Villarreal ocupa la tercera plaza de la clasificación en Liga, está disputando Liga de Campeones y está inmerso en la competición de la Copa del Rey.
Cambios en plantilla y mejora colectiva
En estas dos temporadas el equipo ha cambiado su fisonomía, ya que se han producido muchos cambios en su plantilla. De la mano del técnico, se ha potenciado a muchos futbolistas que acabaron siendo traspasados por cantidades importantes, y a la mejora individual de los jugadores se suma la mejora del rendimiento colectivo.
El equipo ha pasado de ser uno de los más goleados —alcanzó el peor registro de su historia hace dos temporadas— a ser uno de los menos goleados, rebajando su media de goles de dos por partido a 0,8 tantos en contra.
Récords y logros históricos
Además, recientemente el técnico logró superar a Manuel Pellegrini como entrenador con más partidos oficiales al frente del Villarreal, un registro con el que ha sido capaz de lograr un ascenso a Primera División, clasificar por dos veces al equipo a la Liga de Campeones, alcanzar una semifinal de la Liga Europa y una de Copa del Rey, además de conseguir siempre la clasificación para competiciones europeas en las temporadas en las que él ha comenzado entrenando.