CASTELLÓ (EFE). Una representación del total de 380 profesores asociados de la Universitat Jaume I (UJI) ha manifestado su "descontento" tras la aprobación del plan de estabilización del profesorado temporal, que la institución aplicará en el curso 2025/2026 en cumplimiento de la nueva Ley Orgánica del Sistema Universitario (LOSU).
El plan ha sido el primero en implementarse entre las universidades valencianas y ha generado rechazo entre los representantes del profesorado asociado. Consideran que la medida no resuelve la precariedad laboral que arrastran y denuncian una posible reducción de sus ingresos mensuales de entre 350 y 500 euros debido a la disminución de créditos docentes sin compensación económica.
Los representantes del profesorado no permanente en el Consell de Govern, Toni Vallet (Professorat Precari al Claustre) y Paco López (MesUJi), votaron en contra de la propuesta. Según Vallet, "la aplicación de la LOSU agrava la precariedad del colectivo, no la resuelve". López ha criticado además la "falta de tiempo" para preparar las candidaturas, ya que el proceso solo contempla diez días para presentar solicitudes.
El procedimiento de estabilización se llevará a cabo mediante un concurso que valorará la experiencia docente previa en la UJI. El colectivo también ha mostrado su preocupación por la posible pérdida de puestos, ya que aquellos que no accedan al proceso no podrán renovar su contrato más allá de agosto de 2025 y no tendrán derecho a indemnización, lo que podría derivar en "demandas por despido improcedente".
La UJI sostiene que se ajusta a la nueva ley
En un comunicado, la Universitat Jaume I (UJI) sostiene que se ajusta a la nueva Ley Orgánica del Sistema Universitario (LOSU) y tiene como objetivo mantener las 380 plazas vigentes. La universidad subraya que el plan busca favorecer la retención del talento y la experiencia docente del profesorado asociado actual, y que la estabilización se realizará mediante un concurso que valorará hasta un 60% la experiencia acumulada en el área de conocimiento correspondiente.
"El proceso de estabilización tiene como fin garantizar que el profesorado asociado mantenga su estabilidad laboral y pueda seguir desarrollando su labor en la universidad, con contratos indefinidos que ofrecen mayores ventajas laborales", explican desde la UJI.
La UJI también puntualiza que "el proceso ha sido negociado y aprobado de acuerdo con los sindicatos y representantes del profesorado", aseguran. Sobre la reducción de créditos, la UJI explica que se ajusta a lo que establece la LOSU, limitando la carga docente de los asociados a un máximo de 12 créditos. En algunos casos, los docentes podrán reducirla a 9 créditos, según sus necesidades. "Hemos sido sensibles a la carga de trabajo del profesorado, garantizando que aquellos con 18 créditos pasen a una dedicación de 12", afirman desde la universidad.
Los representantes del profesorado han instado a la rectora, Eva Alcón, a impulsar mejoras laborales en su último año de mandato, entre ellas la aplicación del convenio colectivo y la firma de un nuevo acuerdo que contemple incentivos salariales.