VALÈNCIA. Chile, 1961. El predicador Paul Schäfer comienza a crear Colonia Dignidad, una comuna en la Región de Maule de la que pocos tendrían escapatoria, y donde serían torturadas y morirían miles de personas. A día de hoy la historia que pudo suceder en este terrible lugar se relata a través de Cuando mi cuerpo dejó de ser casa, un relato a modo diario en el que la autora Emma Sepúlveda, nacida en Argentina y afincada en València, relata las memorias de lo que podría haber vivido una mujer en estos campos. Sepúlveda se atreve con una narración dolorosa y que va directamente al corazón, que hace estremecer con testimonios directamente sacados de cartas, relatos contados en juicios y torturas detalladas en la condena de Schäfer. Con este libro pretende hacer esa justicia que llegó demasiado tarde para el predicador, un ajuste de cuentas desde la voz de la primera persona, con unas memorias que buscan la indignación ciudadana y la agitación política de la primera a la última página.
No es la primera vez que Sepúlveda se atreve con un relato en el que haga el papel de justiciera. La autora ha escrito hasta la fecha más de 30 libros que abordan tanto temas históricos como ficciones para defender los derechos latinos. Entre estos escritos destaca 70 días de noche, en el que cuenta el rescate de 33 mineros en Chile, también escribió la historia de las artilleras, las madres de los desaparecidos de la dictadura chilena, y denunció con esta obra el gobierno de Pinochet. Todo ello le ha llevado a ser galardonada con el premio Thorton por la Paz, el Nevada Writers Hall Of Fame y ha ganado en tres ocasiones el Latino Book Award. Además de todo esto fue parte del comité que creó el primer museo de los latinos en Washington D.C. Y tras conocer a Emma toca acercarse a Sarah, el personaje ficticio que relata las memorias de Ilse, su madre, quien estuvo atrapada en las Colonias Dignidad durante décadas.