PLAZA CERÁMICA

La patronal de Castellón defiende un frente común contra los nuevos costes ambientales en el azulejo: "ponen en riesgo la industria"

La CEV pide al Gobierno que se una a Italia, Francia y Alemania y defienda en Bruselas asignaciones de C02 más realistas y acordes con la situación tecnológica

Suscríbe al canal de whatsapp

Suscríbete al canal de Whatsapp

Siempre al día de las últimas noticias

Suscríbe nuestro newsletter

Suscríbete nuestro newsletter

Siempre al día de las últimas noticias

CASTELLÓ. La patronal nacional del azulejo (Ascer) dio la semana pasada la voz de alarma ante los nuevos planes ambientales de la Unión Europea durante las jornadas en Bruselas de la European Ceramic Days 2025: Bruselas plantea eliminar en su propuesta inicial el 34% de las asignaciones gratuitas de CO₂ en 2026-2030, lo que supondría un coste adicional para el sector de unos 200 millones de euros. Esta medida se suma al recorte anunciado por el Gobierno del 37,5% en las ayudas a la cogeneración, que comprendería otros 30 millones. Dos medidas que pueden llevar a la industria cerámica a su precipicio. A la vista de ello, la patronal de Castellón (CEV) se suma a las reivindicaciones del azulejo y defiende un frente común para proteger al “principal motor económico de Castellón”.

La organización empresarial mueve ficha y reclama al Gobierno central que negocie en Bruselas “asignaciones más realistas y acordes con la situación tecnológica” de la cerámica, tal como están realizando otros Estados miembros como Francia, Alemania o Italia.

La junta directiva de la CEV ha mostrado en un comunicado “un apoyo unánime” al sector cerámico “ante el grave impacto que supondría la propuesta actual de revisión del Sistema Europeo de Comercio de Emisiones (EU ETS) y el recorte anunciado de la retribución a la cogeneración”. “Ambas medidas, tal y como están planteadas, ponen en riesgo la viabilidad del clúster cerámico de Castellón, motor económico, industrial y social de la provincia”, advierte la CEV, que ya movilizó hace dos años a la sociedad civil para defender a la cerámica ante las Administraciones públicas por el incremento entonces de los precios de la energía debido a la guerra de Ucrania.

La patronal informa de que, según el análisis del sector, la propuesta preliminar del EU ETS para el periodo 2026–2030 contempla una reducción del 34% en las asignaciones gratuitas, el recorte máximo previsto en la revisión. Este cambio implicaría un coste adicional de entre 109 y 163 millones de euros anuales para las empresas del clúster. A ello se suma el impacto de la nueva propuesta de orden del Ministerio para la Transición Ecológica relativa a la cogeneración, que llevaría a una reducción del 37,5% en la retribución regulada, equivalente a otros 30 millones de euros anuales menos para el sector.

En conjunto, estos costes regulatorios equivalen a entre el 60% y el 80% del beneficio neto de toda la industria, lo que compromete directamente la continuidad de muchas empresas. Por su parte, la industria cerámica europea -Cerame-Unie- expone que las empresas tendrían un coste extra del 40% por la propuesta de la UE.

La CEV explica que el azulejo aplica las Mejores Técnicas Disponibles (BAT) y no dispone actualmente de tecnologías desarrolladas viables para lograr nuevas reducciones de emisiones. De esta manera, considera que exigir reducciones que técnicamente “no se pueden alcanzar no disminuye las emisiones globales, sino que penaliza a la industria europea más eficiente, fomenta la entrada de productos extracomunitarios con mayor huella ambiental y debilita la capacidad de inversión para avanzar en la transición energética”.

A su juicio, “un retroceso del sector tendría consecuencias severas para la economía provincial en forma de destrucción de empleo industrial, pérdida de competitividad y debilitamiento del clúster cerámico más importante de Europa”.

"La transición energética solo será posible si es industrialmente viable y socialmente sostenible"

“La transición energética solo será posible si es industrialmente viable y socialmente sostenible. No se puede construir una política climática efectiva debilitando al principal motor industrial de nuestra provincia. El sector cerámico necesita un marco regulatorio realista, predecible y alineado con las capacidades tecnológicas actuales”, defiende el presidente de CEV Castellón, Luis M. Martí.

La CEV Castellón, en línea con lo solicitado por el clúster cerámico, reclama al Gobierno de España y a las instituciones europeas que revisen y pospongan la reducción del 34% de las asignaciones gratuitas del EU ETS hasta que existan alternativas tecnológicas viables; que se incluya al sector cerámico en las compensaciones por costes indirectos del ETS; que se restablezca una retribución adecuada a la cogeneración, garantizando un marco estable que reconozca sus costes reales y su aportación al sistema energético; y que aumenten los umbrales que permitan simplificar las obligaciones ETS para pymes industriales.

“El clúster cerámico es el motor económico de la provincia”

Martí insta a que se tenga en cuenta “que el clúster cerámico no es un sector más: es el motor económico de la provincia”. Genera un tercio del PIB provincial (32,2%), concentra gran parte del empleo (26,4% del total de la provincia de Castellón) y sostiene a cientos de empresas auxiliares. “Hay que hacer un frente común para proteger al principal motor industrial de la provincia”, resalta.

Recibe toda la actualidad
Castellón Plaza

Recibe toda la actualidad de Castellón Plaza en tu correo