VILA-REAL. El Ayuntamiento de Vila-real avanza en el plan para urbanizar una de sus zonas periféricas, concretamente en los alrededores del pabellón ubicado en el barrio Melilla. Así, el consistorio ha iniciado el proceso para la expropiación de seis parcelas situadas junto al polideportivo, según publicó la pasada semana el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV). En particular, se trata de unas edificaciones bajas, antiguamente conocidas como corrales y utilizadas para el almacenaje, localizadas entre las calles Xèrica y Pobla Tornesa. En este sentido, el objetivo del gobierno municipal estriba en, una vez completada la adquisición del conjunto, "sanear la zona de los patios y ampliar" tanto el aparcamiento como el jardín adyacentes a la instalación deportiva para completar la manzana, afirma el concejal de Territorio, Emilio Obiol.
La actuación se enmarca como una "oportunidad" para la obtención por parte del Ayuntamiento del suelo dotacional y su futura urbanización, programada ya en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de la localidad, que data de 1994. A tal efecto, el procedimiento seguirá los cauces habituales, que nacen a partir del actual sometimiento a exposición pública del proyecto, y se desarrollará "durante los próximos meses". Cronológicamente, tras el anuncio de la expropiación, se abrirá un periodo de alegaciones para los propietarios de las parcelas antes de acometer la compra y el posterior proyecto urbanístico para la construcción definitiva.
Las actuaciones en el barrio Melilla
El establecimiento de la población en el barrio Melilla de Vila-real se incrementó durante la segunda mitad del siglo pasado, especialmente entre las décadas de los años 50 y 70. Las edificaciones construidas, marcadas por los mencionados corrales y almacenes, acogieron la llegada de inmigrantes desde otras regiones de España. En la actualidad, desde 2012, se han llevado a cabo diversos proyectos para la mejora de la zona, como la construcción del pabellón ese mismo año o la apertura de la calle Atzeneta, "una de las grandes reivindicaciones de los vecinos", asegura Obiol.
- El polideportivo se construyó en 2012 dentro de una manzana con un jardín adyacente.
El derribo de las construcciones situadas en las parcelas, algunas en ruinas, una vez sean propiedad municipal, responde también a una reclamación "que viene desde hace tiempo". En este sentido, diversos vecinos del barrio denunciaron "el peligro y el foco de suciedad" que supone la zona en una visita del alcalde, José Benlloch, y la vicealcaldesa, María Fajardo, según publicó El Periódico Mediterráneo. El proyecto de expropiación, que también contempla el acondicionamiento de la calle junto a las edificaciones, puede ser examinado presencialmente en el propio consistorio de lunes a viernes en horario de 09:00 a 14:00 horas.
