Colorker firmará "en breve" la urbanización del hotel Simba para ubicar sus oficinas y showroom

CASTELLÓ. El convenio entre Colorker y el Ayuntamiento de Xilxes que define las obras de reurbanización que transformarán el antiguo Hotel Simba en la sede y el showroom de la compañía cerámica está muy cerca de firmarse. De hecho, el consejero delegado de la azulejera, Manuel Ángel Murillo, reconoce que se suscribirá "en breve". 

Aunque no da detalles de cuándo se puede formalizar -"lo normal es que sea antes de final de año", reconoce no obstante-, Murillo apunta que el último trámite que había solicitado la compañía, "una subsanación", se ha superado "hace muy pocos días" y tan solo resta por resolver mínimas exigencias municipales. 

El documento fija el coste de las obras de reurbanización del sector terciario en 1,7 millones de euros y otorga a Colorker un plazo de 9 meses para culminarlas. En concreto, está pendiente de ejecutar una actualización de las instalaciones de agua potable, saneamiento y alumbrado, además de la mejora de los acabados superficiales. Eso sí, el coste total de la actuación para convertir el hotel en la sede central de la compañía será mayor. 

A por la reparcelación

El alcalde de Xilxes, José Martínez, explica que la tramitación "está casi toda hecha y solo falta hacer efectiva la reparcelación, aunque para eso todavía no tenemos una fecha fijada". Martínez ha asegurado que Colorker ya dispone de la autorización del suministro eléctrico de Iberdrola para transformar el antiguo Hotel Simba en su nueva sede central. Ese permiso retrasó el año pasado la aprobación de la modificación puntual número 3 del plan parcial del sector terciario Finca dels Tres Termes, que sustenta el cambio de uso del hotel emplazado en la antigua N-340.

Colorker inició los trámites para reurbanizar el entorno del Hotel Simba en 2017, cuando compró el recinto y cogió el testigo que la anterior empresa adjudicataria de la urbanización tenía desde 1997. Además del cambio de uso, el nuevo planeamiento urbanístico también implicará la variación de uso de una zona verde de 7.399 metros cuadrados y la reserva de una parcela dotacional de 13.509 metros cuadrados.

La unificación de sus instalaciones en el antiguo hotel de Xilxes permitirá a Colorker mejorar la productividad, acercar el personal a la planta y mejorar sus procesos internos. Asimismo, el nuevo showroom posibilitará que se muestren los productos en un espacio renovado y cercano a la fábrica. Eso sí, como es lógico la pandemia ha retrasado ligeramente el proyecto. "Este año hemos tenido que levantar todos un poquito el pie del acelerador", reconoce Murillo. 

Newker se instala en la factoría de l'Alcora

La noticia se produce cuando Colorker ha encontrado una solución para su planta de l'Alcora, donde cesó su producción hace ya doce años, justo en la anterior crisis económica. Después de un proceso de venta fallido a Emigres, con la que llegó a un principio de acuerdo que se rompió sin perjuicio para ninguna de las dos partes, según ha podido saber este diario la azulejera ha arrendado a la comercializadora castellonense Newker una parte de sus antiguas instalaciones.

De hecho, Newker se encuentra actualmente trasladando material a la antigua factoría, donde tiene previsto ubicar su almacén de producto, un proyecto del que la firma ha preferido no dar más detalles. 

La parcela, para la que ahora Colorker ha modificado sus intenciones de venta, está situada en el camino Foyes Ferraes, muy cerca de la CV-16. Tiene 36.254 metros cuadrados de superficie y cuenta con 13 naves aptas para la preparación y fabricación de productos cerámicos con una superficie total construida de 25.716 m².