Compromís per Vila-real dice que más de la mitad del pago a proveedores se da fuera del plazo legal

VILA-REAL. Compromís per Vila-real ha denunciado este lunes que el Ayuntamiento abona más de la mitad de facturas a los proveedores locales fuera del plazo legal, tal y como certifica un reciente informe municipal firmado por la viceinterventora, según ha indica el portavoz de Compromís per Vila-real, Josep Pasqual Sancho, a través de un comunicado.

El edil ha señalado que en un solo ejercicio completo se han abonado más de 20 millones de euros en 10.835 facturas. De estas, 5.754 (un 53,11%) se han pagado fuera del período legal, mientras que 5.081 se han pagado dentro del plazo.

Asimismo, del documento al que hace referencia Compromís se extrae otro dato que llama la atención del Grupo Municipal, como es el período medio de tramitación de facturas, que se sitúa en 87,02 días. “Casi tres meses para que cualquier empresa o autónomo cobre por un servicio ya prestado”, indica Sancho, quien recuerda que “estos casi 90 días son una estimación media, ya que hay gente que cobra mucho más tarde o posiblemente antes”.

En cualquier caso, para los que han sido socios de gobierno del PSOE durante los últimos ocho años, se trata de un dato “inaceptable". Compromís indica que, según datos del Ministerio de Hacienda, la mayor parte de los ayuntamientos del País Valencià pagan en menos de 30 días o, en su defecto, en un plazo de 30 a 60”. “Lo raro es encontrar consistorios que lo hagan en más de 60 días y ese es el caso de Vila-real y algunos otros municipios de la zona, solo superados por Altura y Morella, municipios gobernados por el partido socialista”, apuntan las mismas fuentes.

El informe al que hace referencia Sancho, concluye que, en distintas ocasiones se producen fallos de ejecución de la plataforma virtual con la que trabaja el consistorio. No obstante, para Compromís per Vila-real, uno de los principales problemas que el equipo de gobierno debe solucionar cuanto antes es el de la contratación de trabajos diversos sin contar con presupuesto en las diferentes partidas. “Es una forma de operar muy poco seria y a la que se han malacostumbrado los de Benlloch, que gastan más de lo que tienen y que, incluso teniendo las cuentas en números rojos siguen contratando servicios, para después pagar tarde y mal a los proveedores, ya que sin dinero no se puede pagar y siempre acaban recurriendo a la modificación de créditos, al movimiento de remanentes o, lo que es peor, a los préstamos”, manifiesta.

“Como siempre hemos dicho desde Compromís, y así lo llevábamos en nuestro programa electoral, hay que conseguir rebajar el período medio de pago a proveedores y eso solo se hace con un equipo que se toma las cosas en serio, que trabaja a pie de calle y que escucha a sus vecinos”, concluye Josep Pasqual Sancho.