grand place / OPINIÓN

Crímenes de guerra

7/03/2023 - 

Los colores azul y amarillo dominaban el escenario, y se reflejaban en los ojos de la Presidenta de La Unión. Con semblante triste y preocupado, con las líneas de la incertidumbre cruzando su frente, Ursula von der Leyen grabó una declaración institucional un sábado por la tarde del Año III d.C. -después de la Covid- que se resumía en dos palabras: crímenes de guerra. 

Eran pocas palabras pero suficientes. "La invasión de Rusia ha traído un sufrimiento indescriptible a Ucrania. Hace casi un año, el mundo descubrió los horrores de Bucha. Yo misma estuve allí y he sido testigo de las atrocidades cometidas por las fuerzas rusas. Cada vez hay más pruebas de ataques directos contra civiles, así como contra la energía y otras infraestructuras. Rusia debe rendir cuentas de estos horribles crímenes”

Y a continuación declaró la creación de un tribunal para procesar el crimen de agresión de Rusia, de forma paralela e independiente al Tribunal Penal Internacional de La Haya. “Y estoy orgullosa de que, en esta conferencia, como primer paso, se firme el acuerdo para establecer el Centro Internacional para el Enjuiciamiento del Delito de Agresión. También con sede en La Haya, “la Unión Europea seguirá trabajando, con nuestros socios, para garantizar que Rusia pague”, añadió Von der Leyen durante la sesión de apertura de la “Conferencia Unidos por la Justicia”, tras el discurso de apertura del presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy, y del presidente de Letonia, Egils Levits. 

El comisario europeo de Justicia, Didier Reynders, que asistió personalmente a la conferencia, también pronunció un discurso en el que expuso las medidas concretas que ha tomado la Comisión y el apoyo que ha brindado hasta ahora para garantizar la responsabilidad por los crímenes de guerra internacionales y los eventuales esfuerzos de reconstrucción en Ucrania.

Al margen de la conferencia, se firmó el establecimiento de un nuevo Centro Internacional para el Enjuiciamiento del Crimen de Agresión (ICPA) contra Ucrania, que conservará las pruebas y preparará la acusación para futuros juicios. La ICPA reunirá a los fiscales y las pruebas de estos tipos de crímenes se almacenarán en un lugar seguro y centralizado. Estados Unidos acordó intensificar su cooperación con el Equipo de Investigación.

Tras el apoyo expresado por los líderes de la UE en el Consejo Europeo de febrero de 2023, este es un próximo paso crucial después de la extensión del mandato de Eurojust y la posterior creación de una nueva base de datos básica sobre pruebas de delitos internacionales. La Comisión Europea copresidirá reuniones plenarias semestrales y el trabajo de coordinación y fortalecimiento de la asistencia a la Oficina del Fiscal General de Ucrania junto con el Servicio Europeo de Acción Exterior.

En la revista Contexto, Stephen Kinzer escribía: “Hoy se considera herético, si no traición, sugerir que todas las partes en el conflicto de Ucrania tienen algo de culpa. (…)  Menos perdonable es la actitud de la prensa. (…) Para quienes fuimos corresponsales de guerra en una época en la que se informaba de los conflictos desde diversas perspectivas, la unilateralidad de la información sobre Ucrania es de lo más sorprendente”. 

Pero la suerte ya esta echada. Y, como ocurrió en la guerra de los Balcanes hace 30 años, pagó el perdedor. Ya no importa que Joe Biden confesara en 1999, cuando era Senador: “Yo sugerí bombardear Belgrado”. 

Veinte años más tarde, el Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia condenó a cadena perpetua al antiguo líder serbobosnio Radovan Karadžić. El expresidente yugoslavo, Slobodan Milosevic, murió en su celda. Y en 2017, el general serbio Slobodan Praljak, que ordenó la destrucción del puente de Mostar, se envenenó durante la lectura de la sentencia condenatoria. 

-Hola David, cuando esta guerra termine, algún día, el tribunal europeo estará preparado para dictar condena. Porque se supone que estará en el bando vencedor…

-Eso espero, Laura. ¡Que termine esa maldita guerra!

Noticias relacionadas

al otro lado de la colina

90 años no son nada

En los momentos de mayor zozobra, y hoy es uno de ellos, es muy oportuno buscar la esperanza y el impulso mirando atrás y recordar todo lo que hemos podido avanzar hasta ahora

next