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Cuento de las niñas soñadoras que querían construir aviones

En el Día Internacional de las Mujeres y las Niñas en la Ciencia.

11/02/2022 - 

 Érase una vez dos mejores amigas. Desde que eran muy pequeñitas les gustaba jugar con Legos y aviones. Vivían cerca de un aeropuerto y veían volar todos los días aviones que dejaban una estela con las que imaginaban divertidas formas y figuras. Un buen día, la profesora de 2º de primaria les preguntó: ¿Qué queréis ser de mayor? Y sin pensarlo dijeron: Queremos construir nuestro avión para volar muy alto. Sin embargo, por la noche en casa, cuando Martina contó a sus padres que quería ser constructora de aviones, le dijeron: -Pero ¡si eso es cosa de chicos! Además, ¿quién cuidará de tus hijos mientras estás construyendo aviones?

Martina se puso triste y se lo contó al día siguiente a su amiga del alma. -Laia, ya no voy a ser constructora de aviones. Mis papás me han dicho que eso es cosa de chicos.

Los años pasaban y las mejores amigas seguían jugando a Lego y veían pasar los aviones, pero Martina ya no quería ser constructora de aviones. Un día vino a la escuela un grupo de ingenieras. Trabajaban en una empresa donde producían plástico a partir de material reciclado. Explicaron que, con las ciencias y la tecnología, podrían hacer muchísimas cosas en sectores muy diferentes como la energía, alimentación, medioambiente, construcción, investigación, edificios, carreteras… ¡incluso construir aviones! Martina de repente sintió nostalgia. Escuchaba lo que decían, las fotos de sus trabajos, los videos que mostraban su día a día… Se armó de valor y levantó la mano en clase. - ¿Y cómo lo hacéis para cuidar de vuestros hijos? preguntó Martina. Las ingenieras explicaron que las profesiones STEM que incluyen las ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas son profesiones como otras. -Todo depende de vosotras, de lo que os guste, lo que os motive y lo que queráis hacer.

Aquella charla hizo que pensar a Martina. ¿Y si ella era una de las personas que, como decían las mujeres ingenieras, habían renunciado a sus sueños por influencia del entorno? Le gustaba crear, construir, hacer cosas, pero como siempre le habían dicho que eso era para los chicos pues se lo terminó creyendo.

Buscó información en internet y descubrió que había mujeres ingenieras, químicas, matemáticas, físicas, investigadoras… y también vio que tenían vida, que tenían familia y amigos. Lo tenía claro, al año siguiente iba a escoger ciencias. Llamó a su amiga Laia emocionada. -Laia, que sí, que yo también quiero hacer ciencias y además iremos a la misma clase. Aquella tarde, Martina y Laia se sentaron en el parque y volvieron a ver pasar los aviones. De nuevo soñaron en construirlos y volar muy alto.

Desafortunadamente, a muchas niñas les pasa como a Martina. Decía un cartel a la entrada de una escuela “Dejémosles ser lo que quieran ser”. Y yo añadiría, “y que lleguen tan alto como quieran llegar, no les cortemos las alas”. En el ámbito familiar podemos hacer muchísimo en el día a día: tener un lenguaje inclusivo, juguetes sin distinción de sexo, actividades extraescolares de ciencias, hablar sobre historias de mujeres científicas, buscar referentes en el círculo cercano y sobre todo escucharlos, qué les inquieta, qué les motiva, qué les ilusiona.

Niños y niñas, ¿queréis saber cómo terminó la historia de Martina y Laia? Llegó el día de escoger la carrera universitaria y no lo dudaron. Querían ser Ingenieras aeronáuticas para construir aviones que volaran por el mundo para contribuir a un planeta mejor y más sostenible, y unir lazos entre países y hermanos.

Ahora que Martina y Laia no nos oyen, dejemos a los niños y niñas ser lo que quieran ser. El futuro está lleno de posibilidades, nunca antes la ciencia y la tecnología nos han podido ayudar tanto en nuestras vidas.

Yo también fui Martina y agradeceré siempre a mi profesora de química que confió en mí y me animó a ser ingeniera, pero hay otras muchas niñas que no logran nunca cumplir su sueño.

Y colorín colorado este cuento de dos mejores amigas que les gustaban los aviones se ha terminado. Buenas noches niños y niñas. Hasta mañana.

La autora es coordinadora programa bpSTEM y miembro de Networking Directivas Castellón

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