CASTELLÓ. La ausencia por lesión de Dani Romera en la derrota del Castellón frente al Nàstic de Tarragona ha evidenciado la falta de una alternativa de similares características en el conjunto albinegro para cubrir la baja del almeriense. En el partido del pasado sábado, el técnico orellut, Rubén Torrecilla, recurrió a Fabricio para ejercer la función de hombre más adelantado y el equipo de la Plana tuvo muchas llegadas, pero desaprovechó remates cómodos dentro del área.
El futbolista brasileño ha demostrado en las últimas jornadas que es un hombre importante para el Castellón, pero sus cualidades más destacables son diferentes a las de un depredador de área como Romera. El otro delantero centro que tienen los albinegros es David Cubillas y el resto de jugadores de ataque de la plantilla son extremos que tienen aptitudes para marcar, pero que no son goleadores natos.
Así las cosas, el Castellón se encuentra con un primer problema esta temporada en lo que a lesiones se refiere y que pone a prueba la validez de sus alternativas. Y es que al margen de que Romera pudiera perderse algún partido más debido a la dolencia que se produjo antes del partido frente al Nàstic, el Castellón necesita tener bien cubierta esa posición pensando a más largo plazo, pues en caso de un contratiempo mayor con la temporada más avanzada, los albinegros correrían el riesgo de debilitarse arriba en la parte decisiva de la competición.
El mercado de invierno puede ser la solución para el Castellón en su objetivo de cubrir mejor esa posición de cara la segunda vuelta, donde cada punto en juego valdrá su peso en oro. De hecho, esa apunta a ser la prioridad en una ventana de fichajes en la que la entidad albinegra buscará sumar efectivos de calidad a su plantilla.