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De 'Miss Sherlock' a 'True Detective': series sobre misterios sin resolver
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ALICANTE. 2022 supuso un año de inflexión en las Guerras del Streaming. Los días de vino y rosas de una perspectivas de crecimiento perpetuo de suscriptores, que financiaban cada vez más (y más caras) producciones ha llegado a su fin con la subida de tipos de interés y las caídas de entorno a un 50% de su valor bursátil de todas grandes compañías de entretenimiento.
Se presenta un 2023 apasionante no solo para los aficionados a las series, películas y documentales, sino también para aquellos que nos gusta hablar de esta industria en términos financieros y económicos. Y para arrancar el año, qué mejor que hacer un repaso de mis deseos para las diferentes plataformas: AMC+, Apple TV+, ATRESplayer Premium, Disney+, Filmin, HBO Max, Movistar Plus+, Netflix, Pluto TV, Prime Video y SkyShowtime).
Que por fin se estrenen las series de AMC en AMC. Parece de cajón, pero AMC en España ha tenido la desgracia de que para cuando llegó la cadena a nuestro país, desde Estados Unidos ya se habían vendido Mad Men, Breaking Bad y, sobre todo, The Walking Dead a otros canales de la competencia. Ni siquiera pudieron estrenar Better Call Saul. Ahora parece que sí lo harán con las nuevas series del universo de Anne Rice, cuyos derechos han comprado, empezando por la nueva versión de Entrevista con el vampiro (que por cierto está francamente bien).
Que nos lleguen antes sus series americanas. Dicho lo anterior, en 2023 no tiene sentido que las series lleguen meses después de su estreno en Estados Unidos. Por ejemplo, la mentada Entrevista con el vampiro concluyó su emisión en USA el pasado 13 de noviembre y no va a llegar a España hasta mediados de enero. Lo mismo va a pasar con Las brujas de Mayfair, que se emitirá en nuestro país una vez concluida su primera temporada al otro lado del Atlántico.
Que enseñen a los usuarios que no necesitan un dispositivo de Apple para ver la plataforma. Apple TV+ se puede ver en web, smart TV, dispositivos móviles, con un FireTV de Amazon, con una Xbox o una PlayStation… y, aún así, la sensación de que es necesario tener un cacharro con una manzanita sigue siendo la mayor barrera de entrada para que los seriéfilos descubran su interesantísimo (y cada vez más amplio) catálogo.
Que puedan estrenar a tiempo para los Emmy la tercera temporada de Ted Lasso. La serie que colocó a la plataforma de la manzana en el radar de los seriéfilos y que ha ganado el Emmy como mejor comedia en sus dos primeras temporadas, está sufriendo un retraso muy largo (y muy costoso) derivado, según las informaciones, de las decisiones tomadas por un Jason Sudeikis que tomó las riendas de la producción en esta nueva entrega. Cambios en los guiones de última hora, decisiones como rodar de un día para otro un episodio en Amsterdam que no estaba previsto… todo se perdonará si al final se consigue estrenar la serie antes de mayo, momento en el que se cierran las candidaturas a estos premios.
Que Cristo y Rey sea un éxito. La serie a priori lo tiene todo: dos protagonistas de relumbrón (Jaime Lorente y Belén Cuesta), la producción de alguien que lo ha sido todo en la televisión en España (Daniel Écija, responsable de la década dorada de Telecinco con Los Serrano, Periodistas y Médico de Familia), una historia cargada de sexo, droga, violencia, infidelidades y nostalgia…
Un nuevo nombre para la plataforma. De verdad, cada vez que tengo que escribirlo tengo que comprobar si he puesto bien las mayúsculas, si ‘player’ va junto o separado de ‘ATRES’… es el momento de rebautizarlo como Atresmedia+ y que todos nos quedemos tranquilos.
Que Bob Iger encuentre el camino y nombre un sucesor. Tras menos de tres años al frente de la compañía, Bob Chapeck fue despedido por el consejo de administración de Disney con nocturnidad y alevosía, unas semana antes de Navidad, para nombrar como sucesor… a la persona que le había puesto a él en el cargo, Bob Iger. El (viejo) nuevo jefe de la casa de Mickey Mouse no solo se enfrenta a una compañía y un entorno muy diferente del que dejó antes de la pandemia, sino a la necesidad de nombrar un nuevo heredero... y que le dure más que el anterior.
Que Andor marque el camino del futuro de Star Wars. Mientras Marvel sigue haciendo su camino, la otra gran saga propiedad de Disney hacía aguas, con multitud de proyectos aprobados y cancelados para la gran pantalla (sin estrenos desde el ya lejano 2019 con el episodio IX) y la tibia (por ser generosos) recepción de El Libro de Boba Fett y Obi Wan-Kenobi en el apartado televisivo. Y en esto llegó Andor, insuflando nueva vida en la franquicia, demostrando que se pueden hacer series adultas en una galaxia muy lejana y apareciendo sin excepción en todas las listas de mejores series de la crítica del 2022.
Que Boyero siga hablando de sus series de producción propia. No podía tener mejor campaña de promoción de Autodefensa que la feroz crítica de El Crítico en El País. La máxima de ‘que hablen de uno, aunque sea mal’ pocas veces ha sido más cierta.
Que sigan haciendo documentales originales. Con la proliferación de plataformas, la posibilidad de que Filmin siga adquiriendo series internacionales es cada vez menor (aunque sigue haciéndolo y muy bien). Pero en los años recientes han encontrado un nuevo nicho con las películas y series documentales que están sabiendo explotar con Oswald, el falsificador (el documental más visto de la plataforma en su historia) como bandera, y que tendrá continuación próximamente como miniserie. La prueba de fuego será Terenci, la fabulación infinita, que tengo muchísimas ganas de ver.
Que la fusión entre Warner Media y Discovery+ no se les indigeste (aún más). La nueva Warner Media Discovery nació lastrada por una deuda de más de 53.000 millones de dólares, y su nuevo CEO, David Zaslav, prometió desde el principio recortar gastos de entorno a 3.000 antes del 2014. Pero esto era mucho más fácil decirlo en mayo de 2021, cuando se anunció la fusión, que a día de hoy, con los tipos de interés escalando, los ingresos por publicidad cayendo y un entorno competitivo feroz a nivel internacional.
Que HBO siga produciendo éxitos. Lejos de las intrigas de HBO Max por la fusión, de las cancelaciones y eliminaciones de series del catálogo, de los cambios dentro de DC, el equipo de HBO, con Casey Bloys al frente, sigue dando lo mejor de sí con éxitos como La Casa del Dragón o la nueva temporada de The White Lotus. El 2023 empezará fuerte con la adaptación de The Last of Us a cargo del creador de Chernobyl, Craig Mazin, y la cuarta temporada de la tres veces ganadora del Emmy Succession.
Que las series les duren. Mucho hablamos de las cancelaciones de Netflix, pero cierto es que, por unas causas u otras, las de la plataforma de Telefónica suelen correr las mima suerte: Hierro, Mira lo que has hecho, Vergüenza, Reyes de la Noche, Arde Madrid… parece que con La Unidad se puede por fin romper esta tendencia.
Que Telefónica aclare el futuro de la producción propia. La cancelación preventiva de la serie que Sorogoyen preparaba para la guerra civil puso en entredicho la apuesta por la ficción de la plataforma, además de ponerse en contra a gran parte de la profesión. Con la escalada de los precios de los derechos deportivos (especialmente el fútbol), hace falta ver si el compromiso sigue firme o Telefónica se conformará con ser un gran agregador de contenido de terceros (lo cual tampoco es mal negocio en los tiempos que corren).
Que salga bien la apuesta por la tarifa con anuncios. Tras años jurando y perjurando que jamás de los jamases la plataforma iba a tener publicidad, los resultados del primer trimestre de 2022 provocó un cambio de guion digno de las mejores series del gigante de la N roja. Las primeras noticias sobre la efectividad de la nueva tarifa con anuncios no son muy halagüeñas (con rumores de que han tenido incluso que devolver dinero a algunos anunciantes por no poder servir todos los anuncios que habían prometido, desmentidos por la compañía), pero los datos oficiales no los conoceremos hasta dentro de un par de semanas.
Que no haya desbandada de suscriptores cuando limitemos la compartición de cuentas. La otra gran línea roja junto a la publicidad que Netflix siempre había mantenido es que no le importaban que sus usuarios compartiesen sus cuentas. Esa torre también empezará a caer este año y el efecto que puede tener sobre su número de suscriptores (y los beneficios) es una de las grandes incógnitas del 2023.
Que la gente descubra la plataforma. Con unos resultados financieros a nivel internacional más que envidiables (junto a Netflix es la única plataforma que gana dinero a día de hoy), su consumo y conocimiento en España sigue siendo muy limitado.
Que incorporen más series de Paramount+. Aunque sea en emisión lineal un día y una hora determinada, al menos hasta que llegue SkyShowtime (ver más abajo), que se repita el experimento que hicieron con la última temporada de Star Trek: Discovery y las series de Paramount las podamos ver de forma legal en España.
Que encuentren nuevas sagas literarias que adaptar. Bosch marcó el camino, The Expanse (rescatada tras dos temporadas en Syfy) lo continuó, La Rueda del Tiempo supuso una piedra en el camino del que se rehicieron con esa gran sorpresa para todos que ha sido Reacher. Y por supuesto, con El Señor de los Anillos: Los anillos de Poder tiraron la casa por la ventana. La retroalimentación entre el producto primigenio de Amazon y sus adaptaciones (me encantaría saber cuántos libros han vendido de cada saga después de anunciar sus respectivas series) es una de las estrategias más claras de la plataforma.
Que aclaren qué van a hacer con la compra de MGM. La compra de uno de los estudios clásicos de Hollywood por ahora solo ha traído despidos, quebraderos de cabeza y restructuraciones en la compañía. Todo habrá valido la pena si al final logran hacer la primera serie de Bond, James Bond, pero los Broccoli, que siguen controlando el futuro audiovisual del espía más famoso de la historia del cine, no parecen estar por la labor… aún.
Que no haya llegado demasiado tarde. Febrero del 2023 puede ser muy tarde para entrar en las Guerras del Streaming en nuestro país, aunque sea con títulos que los seriéfilos llevamos muchísimo tiempo esperando como Star Trek: Strange New World, Yellowstone (y sus precuelas 1883 y 1923), Lioness, Tulsa King con Stallone o Mayor of Kingstown, con Jeremy Renner (que felizmente parece que se recupera poco a poco de su accidente). Y éstas, por la parte de Paramount, que Peacock va a estrenar en 2023 series como Poker Face y Mrs. Davis que tienen muy buena pinta.
Que apuesten por la producción española. La compra de 21 series internacionales (incluidas cuatro españolas) producidas por HBO Max que ésta había eliminado de su catálogo es toda una declaración de intenciones de que la plataforma tiene intención de copiar a Netflix no sólo en su disponibilidad global sino también en dónde va a producir su próximo contenido. A ver si consiguen tener su propia Casa de Papel…
* Carlos Navas es director del festival alicantino Series Nostrum
A finales de los 90, una comedia británica servía de resumen del legado que había sido esa década. Adultos "infantiliados", artistas fracasados, carreras de humanidades que valen para acabar en restaurantes y, sobre todo, un problema extremo de vivienda. Spaced trataba sobre un grupo de jóvenes que compartían habitaciones en la vivienda de una divorciada alcohólica, introducía en cada capítulo un homenaje al cine de ciencia ficción, terror, fantasía y acción, y era un verdadero desparrame