Asegura sentirse afortunada, ya que siempre ha podido vivir de las palabras. Periodista, escritora y correctora literaria, Irene Genovés (Valencia, 1974) aprendió muy pronto a compaginar su carrera como reportera con la escritura para niños, con más de medio centenar de relatos publicados en los proyectos educativos de la editorial Santillana. Ahora acaba de salir a la luz su primer libro infantil en solitario, De Tutucán a Cantutú, un viaje al mundo de la imaginación «para todas las edades»
VALÈNCIA.- En el libro De Tutucán a Cantutú (Libros Indie) nada es lo que parece a simple vista. Ilustrado por el artista gráfico Vicent Beneito, la publicación viene avalada por Jorge Maronna, fundador de Les Luthiers, quien define el libro en la contracubierta como una obra «rebosante de ideas y sorpresas, poético, con lindos toques de humor y un final emocionante».
«Es un libro para niños que encanta a los mayores», explica su autora. La obra está formada por cinco cuentos relacionados entre sí «en donde nada es lo que parece a simple vista, porque todo depende de la perspectiva desde la que se miren las cosas». De hecho, «según la edad que tengas al leerlo entenderás unas cosas u otras».
Con una estructura circular, en donde el fin es el principio, De Tutucán a Cantutú invita al lector a recorrer todo un mundo imaginario atravesando cinco reinos sorprendentes. En el camino se encontrará un príncipe que estornuda por las manos, una princesa que sabe muy bien lo que quiere, un pincel que todo lo pinta enamorado de una goma que todo lo borra, una sardinita y un tiburón que trabajan juntos por alcanzar sus sueños y un pueblo que caza palabras para alimentarse de historias.
«Los cuentos se pueden leer de forma independiente, pero si los lees todos juntos adquieren un sentido diferente», señala la autora. De hecho, el libro está concebido «como un viaje» que empieza en Tutucán, donde habita el Príncipe Estornudos, «que estornuda por las manos y que resulta incómodo para la vida en la corte», hasta Cantutú o el País el Mundo al Revés, donde gobierna el Príncipe Sano y donde la princesa Coralinda, personaje secundario hasta el momento, se convierte en auténtica protagonista de toda la historia.
A través de personajes sorprendentes, aventuras inesperadas y mucho sentido del humor, De Tutucán a Cantutú seduce a niños, padres y profesores por su imaginación desbordante y por los valores que transmite: diversidad cultural, aceptación del otro, integración, convivencia, igualdad y cultura del esfuerzo. De hecho, «el libro tiene un público muy diverso», asegura Irene Genovés. «Me lo han pedido para programas de animación a la lectura en colegios, pero en las ferias del libro también lo han comprado adultos que querían regalarlo a sus parejas, adolescentes que se quedaban enganchados con el trasfondo de las historias y, por supuesto, muchos padres para sus hijos pequeños».
El libro no ha dejado de viajar desde que salió publicado a finales de mayo con un gran éxito de público. Estuvo presente en la Feria del Libro de Madrid y en la de Vallecas; llenó el aforo de la librería Troa Ideas de Valencia el día de su presentación oficial y en Madrid consiguió reunir una gran afluencia de público en la céntrica librería Troa Neblí a pesar de coincidir con la cumbre de la OTAN; el 17 de junio se presentó ante ciento cincuenta niños de segundo y tercero de primaria en el Colegio Nuestra Señora de Loreto de Valencia y tres días después fue el protagonista de un club de lectura de sexto de primaria del Colegio Lope de Vega de Nules (Castellón). El libro acaba de cumplir dos meses de andadura y ya está a punto de salir la segunda edición.
«Creo que el secreto del libro está en que las historias son divertidas y sorprendentes para los niños pequeños, que ven el lado divertido, pero al mismo tiempo actúan como los espejos distorsionadores de Valle Inclán para decir muchas cosas sobre la realidad que nos rodea y transmitir una educación en valores», resume Irene Genovés.
En este sentido, la autora utiliza las figuras clásicas de los cuentos para conectar con los niños, aunque sus personajes transgreden la tradición cuentista desde la primera línea del libro. De este modo, los personajes entroncan directamente con la sociedad actual, una sociedad en donde conviven múltiples culturas y puntos de vista, una sociedad igualitaria, cosmopolita y feminista.
«Me preocupa nuestro papel en el mundo», afirma la autora. «Creo que siempre podemos aportar nuestro granito de arena para construir un mundo mejor y más feliz para todos». Y en eso, «es fundamental la educación».
Licenciada en Ciencias de la Información, Irene Genovés ha trabajado en diversos medios de comunicación, tanto de radio como de prensa escrita, entre ellos el periódico El Mundo, la emisora autonómica Ràdio 9, la revista alemana Ecos de España y Latinoamérica y el diario La Verdad de Alicante, perteneciente éste último al grupo Vocento. Como autora tiene más de medio centenar de cuentos, obras de teatro y textos informativos publicados dentro de proyectos educativos de la editorial Santillana, tanto en España como en sus filiales latinoamericanas. En 1991 consiguió sus primeros galardones literarios, logrando el segundo premio en el Certamen Nacional de Literatura María Agustina por el relato El pájaro Azul y siendo mención honorífica en la XIV Edición del Premio Casa Museo Azorín de relato con Réquiem por una luna. Tres años después consigue el segundo premio del Concurso de Relato Breve de la Casa de la Cultura de Burjassot (Valencia) por Quan la lluna és plena y en el año 2000 queda finalista en el I Concurso de Periodismo Premio Iberoamericano Lázaro Carreter.