CASTELLÓ. El pleno de la Diputación de Castellón ha aprobado este martes el reparto por municipios de los 15 millones de euros que en 2023 aporta esta institución al Fondo de Cooperación Municipal de la Comunitat Valenciana.
Unas cantidades que oscilan entre los 62.086 euros del municipio más pequeño, Castell de Cabres, y el 1.375.590 euros de la capital de la provincia. En el reparto de es determinante el número de habitantes de cada municipio aunque la Diputación de Castellón ha introducido factores de corrección en forma de discriminación positiva a favor de los ayuntamientos de pueblos más pequeños y con menos habitantes.
La intención del área de Hacienda es la de realizar las transferencias de forma inmediata para que los ayuntamientos puedan disponer de los recursos que les corresponden con la mayor celeridad.
La aprobación del reparto del Fondo de Cooperación Municipal se ha realizado en el último pleno celebrado antes de las elecciones municipales del próximo domingo, el número 58 de los presididos por José Martí, algunos de cuales se hubieron de celebrar de forma telemática durante el periodo de pandemia.
Por otra parte, en la sesión plenaria de este martes se ha aprobado una declaración institucional de adhesión al ‘Manifiesto por el mantenimiento de la economía de Castellón’. En él se solicita que «se desplieguen ya» las ayudas del Gobierno a la industria cerámica provincial con el objetivo de «salvar Castellón» porque el clúster cerámico «es el motor de nuestra provincia, responsable de uno de cada tres empleos y necesita ayuda».
Ha sido con el voto unánime de las diputadas y diputados provinciales del Partido Socialista, Partido Popular, Compromís y Ciudadanos. De esta forma, el mandato 2019-2023 se ha cerrado con la aprobación de 86 declaraciones institucionales y 49 mociones respaldadas por los cuatro grupos representados en el pleno.
En el texto de la declaración institucional se incide en que «Castellón es cerámica» porque el 36% de la economía provincial corresponde a la actividad industrial y que este territorio es la cuna de la mayor industria cerámica europea, líder mundial en fritas y esmaltes, y de una de las mayores refinerías de España. Además, se resalta la existencia de industria mecánica, química y renovable.
El documento destaca que «miles de profesionales de actividades más o menos relacionadas con el azulejo crecen y se emplean en Castellón» y que el «el éxito del clúster de Castellón es el fruto de docenas de años de esfuerzo y compromiso con la provincia, de inversión continúa en innovación, sacrificios personales y empresariales durante los peores años de la crisis financiera primero y de la sanitaria después».
A todo lo anterior hay que sumar el acierto de «estrategias claras de crecimiento durante los buenos años», porque «ha favorecido que las empresas del clúster sean bien vistas» en el resto de España y a escala internacional.
El manifiesto por el mantenimiento de la economía de Castellón cuenta con el respaldo distintas organizaciones empresariales, sindicales, colegios y entidades profesionales.