CASTELLÓ. La Diputación de Castellón y el Teléfono de la Esperanza pondrán en marcha este jueves 1 de octubre un nuevo servicio de acompañamiento telefónico para personas mayores de 65 años que viven solas o que se encuentran en riesgo de exclusión social. El objetivo de esta campaña, según la vicepresidenta y diputada de Bienestar Social, Patricia Puerta, no es otro que brindar apoyo psicológico y emocional a la gente que más lo necesita, haciéndoles saber que no están solos e integrándolos dentro de la sociedad.
El arranque de Escuchando a los Mayores, tal y como se nombra el programa, se hará coincidiendo con la conmemoración mundial del día de la gente mayor. A partir de entonces, se pondrá en marcha el acompañamiento y el seguimiento telefónico, que según ha detallado Puerta, "pondrá especial hincapié en la atención psicológica y social".
En este sentido, la vicepresidenta ha incidido en que la pandemia "ha agravado los problemas psicológicos de las personas mayores que, por el ciclo de la vida, han perdido a sus familiares más directos y que ahora se sienten amenazadas por la soledad". "Esto nos obliga a actuar", ha añadido, "porque si no lo hacemos, está demostrado que el aislamiento puede comportar el deterioro de la salud mental".
Desde el Teléfono de la Esperanza, la presidenta Eneyda Paz ha explicado que el acompañamiento empezará siendo por teléfono, dando así la oportunidad a la gente mayor para que se exprese y que les cuente sus necesidades y sus preocupaciones. "Todo esto nos servirá para diagnosticar y tratar correctamente su problema", ha dicho.
En caso de que no sea posible, se harán 12 llamadas más, con lo que se evaluará si el usuario tiene que pasar a atención psicológica presencial. Todo el servicio es completamente gratuito. "Queremos que la gente mayor se motive y que se les alivie su sufrimiento", ha añadido Paz.
En cuanto al proyecto, también se habilitarán espacios físicos con actividades grupales para favorecer la integración social y la autoestima de las personas usuarias y se abrirá una nueva ventana de asesoramiento para familiares, cuidadores y agentes sociales en materia de soledad y vejez.
La Diputación financia parte de este servicio con una ayuda de 8.800 euros proveniente de la convocatoria de subvenciones a entidades privadas prestadoras de servicios sociales. El Teléfono de la Esperanza cuenta actualmente en Castellón con 32 voluntarios que se encargan de la atención telefónica y las consultas presenciales.
Patricia Puerta ha recordado que, en cuanto a gente mayor se refiere, las líneas de actuación son más amplias. "Desde el inicio de la pandemia hemos reforzado el servicio de teleayuda para atender y hacer acompañamiento a los más de 3.000 usuarios de que dispone y hemos firmado un convenio con Cruz Roja para garantizar la alimentación y la higiene básica de las personas mayores en riesgo de exclusión del interior provincial", ha apuntado.
Por otro lado, los servicios de promoción de la autonomía personal, que se ha visto ampliado este otoño con una decena de centros más, continuaron trabajando desde casa durante el confinamiento.