El Castellón busca la pólvora perdida

CASTELLÓ. El Castellón dispone de tres delanteros en su plantilla, aunque solo dos de ellos cuentan de verdad para Albert Rudé. El otro, David Cubillas, juega únicamente los minutos de descuento, incluso cuando sus compañeros de línea están de baja.

Con las suplencias permanentes del capitán y las lesiones de Jesús de Miguel y Adrián Fuentes, el conjunto albinegro ha jugado sin delantero natural en el once inicial en las tres últimas jornadas, mientras que en la anterior, ante el Intercity, se vio obligado a sustituir al ex atacante del Unionistas a los 20 minutos de juego. La ausencia prolongada de puntas ha penalizado al equipo de la Plana, que solo ha obtenido tres puntos de 12 posibles y ha generado muy poco en ataque, con tres goles anotados.

Esta anomalía podría llegar a su fin este fin de semana con motivo de la visita del Nàstic de Tarragona a Castalia, pues en el primer entrenamiento preparatorio para este choque ha trabajado con normalidad Fuentes. El regreso del madrileño no le garantiza la titularidad tras un mes sin competir, pero supone una buena noticia para Rudé con vistas a ampliar su abanico de posibilidades en ataque. De no jugar de inicio, podría ser una solución en la segunda parte.

Redución de efectivos en la enfermería

La vuelta al trabajo de Fuentes confirma la dinámica de reducción de efectivos que está teniendo la enfermería del Castellón. Limitado por las lesiones durante las últimas semanas, Rudé ya recuperó a Iago Indias y Javi Antón ante el Numancia –el lateral izquierdo se perderá el próximo partido, pero por sanción- y aspira a dar de alta a algún jugador más antes del domingo, ya que de momento siguen sin estar disponibles Salva Ruiz, Borja Granero y De Miguel. 

Las lesiones han afectado a la mayoría de refuerzos de invierno del Castellón. Y es que de los cinco jugadores que se han incorporado en enero, solo Roland Baas y Suero se han librado de esa plaga. El primero, que solo ha participado en un partido, apunta a jugar ante el Nàstic debido a la sanción de Antón y la baja, ya prolongada, de Salva Ruiz.